“Es un bochorno que nuestros escolares estén obligados, sin criba de edad, a recibir mensajes explícitos relativos a la masturbación femenina de mujeres de más de 60 años o el sexo durante la menstruación”, lamenta esta formación de derechas. La campaña apuesta por la educación sexual como forma de alcanzar una sociedad más igualitaria.
El Ministerio de Igualdad presentaba, con motivo del pasado 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres, una campaña que busca poner en valor la educación sexual como base fundamental para la igualdad. Con el lema ‘Ahora que ya nos veis, hablemos’, tiene entre sus objetivos fomentar el diálogo y la conversación en torno a la sexualidad, así como la eliminación de tabúes y la apuesta por la educación sexual como forma de alcanzar una sociedad más igualitaria.
Pero al PP de El Puerto de Santa María que la campaña se vea en sus calles, no le parece nada bien. Así, el secretario general de esta formación de derechas y concejal de Presidencia, Javier Bello, ha exigido al Gobierno central de PSOE y Unidas Podemos que retire la cartelería ubicada en soportes publicitarios municipales (explotados por alguna empresa privada), “muchos de ellas muy cercanas a centros educativos y parques infantiles”. Para Bello, hay mensajes “que rayan lo obsceno y que en El Puerto causan incomodidad a muchas familias que así nos lo han trasladado”.
En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, este político conservador insiste en que “es un bochorno que nuestros escolares estén obligados, sin criba de edad, a recibir mensajes explícitos relativos a la masturbación femenina de mujeres de más de 60 años o el sexo durante la menstruación”, sin tener en cuenta, según su interpretación puritana, “el impacto que puede tener en nuestra infancia”, cuya educación, opina, “tienen que elegir sus padres y madres o tutores y nunca puede estar marcada por una imposición ideológica como la que tratan de aplicarnos, en un adoctrinamiento sin parangón”.
Es más, ya tirando de argumentario populista, Bello considera “un insulto y una ofensa a todos los españoles” que “comprueban como sus impuestos son utilizados para sufragar este tipo de campañas millonarias mientras hacen malabares para llegar a finales de mes”. Pero hay más, aprovecha su crítica a la campaña de Igualdad para soltar sin venir a cuento toda una retahíla de mensajes reaccionarios, mezclando a “terroristas en su casa”, “golpistas volviendo y fuera de la cárcel”, “leyes destructivas como la Ley Trans o la de sólo sí es sí”, y para rematar, “la luz y la gasolina más alta de la historia”. Y no podían faltar las alusiones a “leyes chapuzas que aún no han corregido y cuyas terribles consecuencias continúan reduciendo las penas de los agresores y violadores, y en muchos casos dejándolos en libertad¨.
DIVERSIDAD, LIBERTAD SEXUAL Y CORRESPONSABILIDAD
El spot de la campaña ‘Ahora que ya nos veis, hablemos’, elaborado por la agencia Ogilvy Madrid, plantea varias escenas con la diversidad, la libertad y la ruptura de tabúes como telón de fondo. Protagonistas como una pareja no normativa y otra con discapacidad, un padre y su hijo (para poner en valor el importante papel de los hombres en la educación sexual), o una mujer de 60 años, exponen situaciones cotidianas, hasta ahora silenciadas, como mantener relaciones sexuales con la regla o la sexualidad en personas mayores, “a la vez que representan la evolución en la educación sexual y la construcción de un país en el que se puede hablar de todo, sin miedo”. Salvo en El Puerto, según dan a entender desde el PP.
En las distintas piezas que forman parte de la campaña, la educación sexual es representada en un sentido integral, sin limitarse al sexo, tratando otras vertientes como la aceptación del cuerpo, el respeto al otro, los cuidados y la corresponsabilidad, el consentimiento, la diversidad o la evolución de la relación con la sexualidad a lo largo de la vida de cada persona. También como una educación sexual para la igualdad, fundamental para prevenir, identificar y actuar frente a las violencias machistas.
La campaña cuenta asimismo con piezas gráficas y para exterior, así como distintas cuñas de radio y materiales para redes sociales. El Ministerio de Igualdad ha destinado 2,5 millones de euros a su difusión.