El entonces alcalde socialista de El Puerto fue señalado por diferentes medios y sobre todo por las derechas, en la antesala de las municipales de 2019, acusado de cobrar sin trabajar en 2014 como empleado de la fundación Andalucía Emprende. Ahora una sentencia ratifica la “honestidad y honradez” siempre defendida por el ahora diputado provincial.
El Tribunal de Cuentas ha dado la razón a David de la Encina en el conflicto iniciado en 2018 cuando se le acusó de faltar durante 50 días hábiles a su puesto de trabajo en la fundación pública Andalucía Emprende, al dedicarse a preparar su candidatura como alcaldable del PSOE.
Los socialistas remarcan en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz que esta sentencia conocida ahora “ratifica la postura que siempre mantuvo De la Encina sobre su honestidad y honradez, y tira por tierra los intentos del PP por dañar y ensuciar su imagen laboral, personal y política”.
A unos cinco meses de las elecciones municipales de 2019 a las que De la Encina pensaba presentarse a la relección como primer edil, se filtraba a través de diferentes medios que había cobrado sin trabajar en 2014 (y que sus jefes “habrían hecho la vista gorda”), “y el PP montó toda una campaña de acoso y derribo”. Años después de aquella “campaña de desgaste”, se resuelve que “sí cumplió con sus obligaciones como trabajador en Andalucía Emprende”.
David de la Encina, quien fuera alcalde de El Puerto de Santa María durante el mandato de 2015 a 2019 con el apoyo de otras formaciones izquierdistas, y que actualmente es diputado de Bienestar Social en la Diputación y presidente de la Mancomunidad de la Bahía de Cádiz, ha expresado ya su lógica satisfacción por este fallo.
“de quienes se aprovecharon de la mentira y el desgaste personal no espero ni siquiera una disculpa. La justicia y el tiempo ponen a cada uno en su sitio”
“Quien me conoce sabe que soy una persona sencilla, muy trabajadora y honesta. Hace cuatro años estando de alcalde de la ciudad lanzaron una campaña de desprestigio contra mí, una campaña basada en la mentira y en hacer daño personal, político e incluso familiar. Hoy me reconforta que, después de cuatro años, la Justicia ha hablado, y ha dictado sentencia reconociendo y estableciendo que soy una persona honesta”, apostilla.
Y añade que “de quienes se aprovecharon de la mentira y el desgaste personal no espero ni siquiera una disculpa. Al revés, esos cuatro años de campaña en contra me han hecho, si cabe, más fuerte. Hoy, con la sentencia y con todo el cariño de tantos miles de portuenses, tengo más ilusión que nunca por seguir demostrando el orgullo de ser honrado y la ilusión por trabajar para recuperar el rumbo de El Puerto de Santa María”.
Insiste el exalcalde portuense en que “la justicia y el tiempo ponen a cada uno en su sitio; y aquí hay una sentencia que restituye mi honor y, quienes se basaron en la mentira para llegar a la Alcaldía han demostrado ser malas personas y malos gobernantes”. “Y también hoy, cuatro años después, la realidad demuestra que la ciudad les ha venido muy grande a quienes se apoyaron en la campaña de mentiras: El Puerto está más sucio, sin orden, sin seguridad, sin turismo de calidad, sin plan de urbanismo ni licencias, sin planes de empleo, sin contratos, o sin mantenimiento en las barriadas”.
“El tiempo y la justicia ponen a cada uno en su sitio y, en este caso, a mí se me ha reconocido como un trabajador honrado y el tiempo ha desenmascarado a quienes se anunciaban como ‘Germán preparados’ y han resultado ser un ‘bluff’, una mentira tan grande como la infamia que lanzaron contra mí”, sentencia este socialista mirando al equipo de Gobierno de derechas de PP y Ciudadanos.
Precisamente fueron populares y naranjas ya en el Gobierno portuense los que denunciaron ante el Tribunal de Cuentas a la anterior directora de Andalucía Emprende, Vanessa Bernad, y a tres antiguos directivos más, a los que señalaban como “presuntos responsables contables, por omisión, como conocedores de la situación de absentismo de dicho trabajador, sin que hayan sido activados mecanismos de control”.
