La empresa portuense Protelec, con más de tres décadas de andadura “y situada a la vanguardia en la ingeniería y diseño de sistemas de alta seguridad”, ha querido hacer público su malestar y denuncia por la “práctica continuada de actitudes que pueden calificarse de competencia desleal” por parte de los comerciales de grandes multinacionales del sector de la seguridad privada en la provincia de Cádiz.
El gerente de esta firma, Ernesto Romero, explica en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz que “con independencia de los servicios y dispositivos que cada empresa ofrece, a través de nuestros clientes hemos detectado que los comerciales de alguna multinacional del sector están utilizando como argumento de ventas manera continuada y sistemática falsedades y calificativos despectivos sobre nuestra empresa, en lugar de vender las bondades de sus productos, que es lo que hacemos las empresas serias”.
Estas actitudes comerciales “negligentes” se pueden englobar claramente en la tipificación legal de competencia desleal, “con el claro objetivo de perjudicar nuestra imagen y reputación sin motivo alguno”, se queja Romero.
Entre esos argumentos, según algunos de los clientes de Protelec abordados por estos comerciales, estarían “desde el cierre de nuestra empresa, el abandono de la prestación de nuestros servicios, la entrada en concurso de acreedores o venta de la empresa”. “Nada más lejos de la realidad”, replica el gerente.
“Con independencia de las molestias que estos comentarios infundados están causando a nuestros fieles clientes, nuestra actividad en el sector de la seguridad privada en el diseño de instalaciones de alta seguridad sigue estando entre los mejores de Andalucía”, se apostilla.
La ley 3/1991 de Competencia Desleal considera textualmente desleal “la realización o difusión de manifestaciones sobre la actividad, las prestaciones, el establecimiento o las relaciones mercantiles de un tercero que sean aptas para menoscabar su crédito en el mercado, a no ser que sean exactas, verdaderas y pertinentes”. Estas prácticas de venta “tan agresivas como desleales en nuestro país pretenden la concentración del mercado”, interpretan desde Protelec.
Por el contrario, Romero ha querido destacar que estas grandes empresas del sector, “de todos conocidas”, “mantienen varios frentes judiciales abiertos por problemas de instalación de miles de dispositivos no homologados en nuestro país que sí constituyen un engaño real para sus usuarios”.