FCC Medio Ambiente seguirá siendo la empresa encargada de la limpieza viaria y de la recogida de basuras (y gestión del punto limpio) en El Puerto de Santa María. Esta multinacional, directamente o a través de diversas filiales, lleva encargándose de este goloso contrato municipal desde 1980. El anterior llevaba caducado desde finales de 2021, y desde entonces la empresa ha estado trabajando en precario en base a prórrogas forzosas.
Tras la correspondiente adjudicación semanas atrás (la licitación se aprobó a finales de 2023 y se ha topado, como suele ser habitual en este tipo de contratos, con trabas por diferentes recursos), hace unos días entraba en vigor el nuevo contrato de este servicio municipal privatizado, adjudicado a FCC por otros 10 años y un coste anual de más de 16 millones de euros (unos 160 millones en total).
El alcalde, Germán Beardo, que ya ha escenificado la firma del mismo, interpreta que “marca un antes y un después en la gestión del servicio, asegurando estabilidad tanto para la ciudad como para los trabajadores”. Sin embargo, Ecologistas en Acción ha vuelto a advertir de que en este pliego licitado y adjudicado se incumple la Ley de Recogida y Tratamiento de Residuos, básicamente al no contemplarse la implantación del obligatorio contenedor marrón (la recogida separada de los biorresiduos).
“APUESTA POR LA SOSTENIBILIDAD”
En la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, el Ayuntamiento pone el foco en la “apuesta por la sostenibilidad”, ya que se obliga a la contrata a una renovación integral de la flota, “que será 100% ecológica y libre de diésel, situando a El Puerto entre las ciudades líderes en gestión medioambiental”.
Toda la maquinaria (entre la que se incluyen camiones, barredoras, baldeadoras, algunas de ellas multifunción), incorporará tecnología avanzada, con vehículos más silenciosos, eficientes y de menor impacto ambiental.
De la misma manera, se contempla la renovación de contenedores y papeleras que “tendrán un diseño más moderno y optimizado, mejorando su capacidad y distribución en toda la ciudad”. Se instalarán modelos más accesibles y funcionales, incluyendo algunas compactadoras, que evitarán el desbordamiento de los residuos y con materiales más resistentes y adaptados a las necesidades del entorno.
Por otro lado, se incrementarán las frecuencias de limpieza, con especial refuerzo en las épocas de mayor afluencia, “garantizando un servicio ágil y eficaz durante todo el año”.
Y el contrato también refuerza los derechos laborales de la plantilla, con una subida salarial del 11%. Asimismo, incorpora un plan de integración social para que personas con diversidad funcional participen en las labores de limpieza y mantenimiento de contenedores.
Durante la primera reunión entre Ayuntamiento y FCC de esta nueva etapa, se ha definido la hoja de ruta para la implementación del servicio, que “se desplegará de forma progresiva”. En el primer semestre llegará la maquinaria ligera, en el tercer trimestre la intermedia y, al finalizar el primer año, “toda la flota estará plenamente operativa”.
El alcalde Germán Beardo sentencia que cumple con el compromiso de dotar a El Puerto de “un servicio de limpieza moderno, eficiente y respetuoso con el medioambiente, mejorando la imagen de la ciudad y la calidad de vida de todos los portuenses”. Cumple, sí, con cuatro años de demora.