La comisión de seguimiento del parking de Pozos Dulces, en El Puerto de Santa María, uno de los dos que el anterior Gobierno local de PP y PA dejó atado pese al gran rechazo social, y que el actual Ejecutivo no pudo detener –pese a sus promesas en campaña electoral; sí paró el proyecto de aparcamiento en la plaza de toros-, se reunió por última vez el 9 de junio de 2017, “por lo que próximamente hará un año que no se mantiene ningún encuentro sobre el tema”. Lo denuncia Levantemos, agrupación de electores que precisamente el PSOE expulsó del tripartito inicial por mantener su coherencia y seguir oponiéndose a estas obras.
“Esta comisión es de vital importancia para que el equipo de Gobierno dé noticias sobre el estado de la obra, y ofrezca explicaciones a la ciudadanía sobre un asunto que supone un gasto de muchos millones de euros de dinero público, con el cual supuestamente se iba a proporcionar una serie de mejoras a la ciudad que seguimos sin ver y sin conocer qué ha pasado con ellas”, apuntan desde esta formación de la oposición en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz.
De este modo, desde Levantemos se exige al bipartito de PSOE e IU que convoque dicha “comisión cuanto antes”, con el fin de dar información a la ciudadanía “y que se conozcan al menos algunos datos que hasta ahora han sido guardados con la mayor opacidad posible sin saber por qué motivos”.
En su momento, el actual Ejecutivo liderado por David de la Encina dijo que el objetivo principal del proyecto, que no se pudo paralizar, es “aprovechar esta obra para que además de habilitar 489 plazas de aparcamientos subterráneos se pueda empezar al fin un auténtico paseo fluvial para que recuperemos el paseo de cara al río con una avenida de la que sentirnos orgullos y orgullosas, la del Guadalete”. La actuación se la adjudicó Gyocivil y se iba a prolongar un máximo de 14 meses. Se inició en noviembre de 2016, y se paralizaba meses después.
Sobre este controvertido proyecto la exconcejala de Levantemos, María José Marín, hace una serie de observaciones, desde su origen: “en primer lugar, la supuesta y prometida contratación de un número importante de desempleados de nuestra ciudad para la ejecución de la obra. Le hicimos la pregunta a los responsables políticos en la comisión de seguimiento y no obtuvimos respuesta. Y en segundo lugar, la fecha de finalización de la obra ha sido modificada en varias ocasiones y aún no sabemos cual es la definitiva, ni si habrá sanciones por incumplimiento”.
También alude a la falta claridad en las cuestiones económicas; “no hemos podido aun ver al alcalde, David de la Encina, ni al concejal de Hacienda, Antonio Fernández, hablándonos de costes de la obra tras las innumerables modificaciones que nos consta ha tenido el proyecto. Estas son solo algunas de las cuestiones que destacamos de un proyecto que se está realizando en el oscurantismo absoluto por un Gobierno que decía apostar por la transparencia”. En su momento se lanzó la cifra de más de 15 millones de euros.
También Irene González secretaria del Grupo Municipal Levantemos El Puerto rememora aquellas manifestaciones del primer edil socialista sobre “luz y taquígrafos en el proyecto de los parkings”. “No entendemos muy bien a que se refería con esta expresión, ya que pasan los días, las semanas, los meses e incluso ya algún que otro año y todas las cuestiones antes apuntadas y un sinfín más de ellas quedan guardadas en los cajones de aquellos que están gobernando de espaldas a la ciudadanía”.
“No les bastó, ni a PSOE ni a IU, con decir sí a un proyecto en el que la mayoría de la ciudadanía decía no, un proyecto ruinoso que recaerá en los bolsillos de los mismos de siempre, sino que además lo gestionan de manera opaca, provocando las sospechas de cualquiera”, se insiste.
Por último, el portavoz municipal de la agrupación de electores, participada por Podemos, José Antonio Oliva, plantea una serie de preguntas referente a la fecha de entrega de las obras: “la fecha que se nos trasladó en la última comisión está más que cerca, ya que es en el próximo mes de junio. Sin embargo, solo basta pasar por las inmediaciones para darse cuenta de la inviabilidad de la misma. ¿Cuál será la fecha real de entrega?, ¿qué coste supone para las arcas públicas este retraso?, ¿por qué se producirá el fin de la obra más tarde de lo previsto? Y un largo etcétera. de preguntas que esperamos que no se queden sin responder”.
“Otro tema que nos preocupa enormemente –agrega Oliva- es el asunto de los puestos de trabajo; seguimos a la espera de tener noticias sobre las supuestas contrataciones de desempleados para la construcción de la obra. Además, una vez finalizada la misma, es evidente que se generarán algunos puestos de trabajo, puestos que no sabemos de qué forma, ni cómo, ni dónde se adjudicarán”.