Como actividad dentro de la Oferta Educativa Municipal 2023/2024 del Ayuntamiento de El Puerto y contemplando la participación de un total de 250 escolares de cinco centros educativos de la ciudad, la concejalía de Medio Ambiente plantea la repoblación del Coto de Isleta, afectado además por diferentes incendios en los últimos años.
La actividad busca concienciar entre los menores sobre los efectos devastadores que causa el fuego en los ecosistemas del entorno. Serán escolares de quinto de Primaria los que a lo largo de esta semana tendrán la oportunidad de “dejar una huella verde” en este suelo ennegrecido por las llamas, pues este pulmón verde lleva tres años consecutivos sufriendo incendios de diversa consideración, siendo el mayor de todos el del pasado agosto en el que ardieron 107 pinos piñoneros, 41 acebuches y un importante número de retamas y sabinas.
Los operarios del servicio municipal de Conservación de Espacios Forestales han ido preparando el terreno, delimitado las zonas y replanteado la plantación, en los que el alumnado plantará 500 nuevos árboles y arbustos.
En la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz se remarca que este Campus de Ocio Verde contará un año más con el equipo de educadores del Centro de Educación Ambiental y Actividades en la Naturaleza (CEAAN) Coto de la Isleta, y tiene previstas una serie de actividades en torno al respeto y conservación de los bosques, con especial hincapié al valor y el tiempo que necesitan los espacios para regenerarse.
SE PLANTARÁN ESPECIES QUE PROPICIEN EL DESARROLLO DE REFUGIOS NATURALES PARA LA FAUNA AUTÓCTONA
Sobre la zona quemada en 2021, 2022 y el pasado verano de 2023, se realizarán las reforestaciones con grupos más reducidos y controlados para evitar la degradación por el pisoteo, ya que los ingenieros forestales del Servicio Municipal de Medio Ambiente quieren dejar que la naturaleza haga su trabajo y tapice el suelo quemado, al mismo tiempo que los ejemplares de retama, lentisco, acebuche y palmito comienzan a rebrotar.
De este modo, los escolares plantarán unos 500 ejemplares de especies autóctonas como son el acebuche, el lentisco, la sabina, el taraje y el algarrobo, leguminosa esta última con capacidad para enriquecer el suelo. “Esta edición se ha focalizado en la plantación de especies que propicien el desarrollo de refugios naturales para la fauna autóctona”, se insiste.
El Ayuntamiento, además, reforestará parte del pinar de Coig con el personal municipal. Estos plantones se cuidan durante todo el año y se establece un calendario de riego con la llegada del verano.
Durante los últimos años, el Consistorio portuense ha plantado más de 10.000 árboles y arbustos en el desarrollo de esta actividad. Las repoblaciones realizadas por escolares han permitido regenerar la antigua escombrera hoy reconvertida en el Parque Guadalete, así como otros espacios como el pinar del Cuvillo, el Coig o el propio Coto de la Isleta.