El Ayuntamiento de El Puerto, que insiste en evitar su papel de mediador al menos, parece que al fin se toma en serio la huelga indefinida de basuras y en su décima jornada ha anunciado que va a solicitar a la Junta de Andalucía la declaración de “emergencia sanitaria” ante la situación que atraviesa la ciudad en sus calles y plazas, donde se acumulan desde el pasado viernes 25 de febrero más de 600 toneladas de residuos “que se han dispersado como consecuencia de los actos vandálicos registrados, lo que podría producir un evidente y manifiesto peligro sanitario”.
El pasado viernes ya se adelantaba el PSOE local, ante la “inacción” del Gobierno local de PP y Cs, reclamando públicamente al presidente andaluz, Juan Manuel Moreno bonilla, que tomara “las riendas” en el conflicto.
De este modo, en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, el concejal de Medio Ambiente, Millán Alegre, confirma que ya se tienen finalizados los informes técnicos necesarios para solicitar la declaración de emergencia sanitaria ante la administración autonómica. “Una situación que a pesar del cumplimiento de los servicios mínimos acordados y aprobados, que en días laborales son del 20% y 30% en festivos, ya se nota en muchos puntos de la ciudad, afectando a la higiene y salubridad del término municipal, en unos días donde el buen tiempo empeora las condiciones”, apostilla este edil del PP.
A los informes técnicos se han sumado los de verificación de la compleja situación por parte de la autoridad sanitaria que ya aprecian riesgos para la salud en distintos puntos de la ciudad entre los que se encuentran la residencia de ancianos El Madrugador, el hospital y el mercado.
En paralelo, Alegre asegura que se han iniciado los trabajos para proceder a la contratación de otra empresa externa que se encargue de “un servicio extraordinario de choque que limpie y mantenga completamente la ciudad, paliando así los efectos mientras dure la huelga”. Esta actuación “permitiría igualmente imponer sanciones a la concesionaria (FCC), tal y como ha hecho A Coruña, que está estos días viviendo una situación similar”.
De este modo, el bipartito de derechas prevé que “los ahorros” que se produzcan durante la presente huelga se destinen completamente a financiar este servicio extraordinario de limpieza durante estos días de conflicto, y “el sobrante” vayan a servicios especiales durante la temporada alta de verano cuando se multiplican las necesidades por el aumento de la población.
El concejal de Medio Ambiente repite que los desacuerdos entre la plantilla y la contrata de basuras “tienen que resolverse en el Sercla o en los tribunales en caso de que los trabajadores de FCC quieran denunciar incumplimientos por parte de la empresa, que son los órganos oficiales habilitados para ello”; y advierte del perjuicio que esta huelga indefinida está creando a comerciantes, hosteleros, empresas y residentes, que “son los que están pagando las consecuencias de un problema entre empleados y empresa de un servicio público esencial”. De este modo, Alegre insiste en lavarse las manos en el conflicto, pese a que FCC es una concesionaria que explota un servicio público del Ayuntamiento, el más costoso.
Finalmente, se sentencia que los servicios de inspección municipales han constatado la existencia de los medios técnicos necesarios para la prestación del contrato y el correcto funcionamiento de los servicios mínimos, “a pesar de las dificultades e incidencias de vandalismo de estos días”.
El comité de empresa del servicio de limpieza (explotado por FCC con prórrogas tras caducar la concesión a finales de 2021) convocaba estos paros indefinidos otra vez, empezando en la antesala del carnaval (el pasado verano se evitaron en el último momento) entendiendo que la concesionaria “incumple gravemente el convenio colectivo y vulnera los derechos laborales de los trabajadores”. Además, se persiste en advertir de la falta de vehículos y el mal estado de los existentes.
Frente a ello, el Gobierno local de derechas se ha posicionado desde el inicio de la huelga del lado de la contrata, rebatiendo las quejas del comité y acusando a la plantilla de “secuestrar a la ciudad” por sus reivindicaciones. Mientras, partidos de la oposición como PSOE e IU han reclamado insistentemente que el Consistorio medie entre las partes, y han lamentado la ausencia total del alcalde, Germán Beardo, en este asunto. Unión Portuense, por su lado, ha instado a la devolución a los contribuyentes de la parte proporcional de la tasa de basura por el servicio no prestado durante el vigente conflicto laboral.