Tras el rechazo por parte de la oposición semanas atrás, ahora sí, un reciente pleno extraordinario del Ayuntamiento de El Puerto ha aprobado el pago de la compensación económica a la empresa municipal Suvipuerto, por la gestión de las viviendas sociales y del registro de demandantes.
En concreto, con los votos a favor de PSOE, IU y Levantemos y la abstención de PP y Ciudadanos, se reconoce el pago del déficit de Suvipuerto en 2018, con lo que la sociedad podrá cobrar los más de 44.000 euros que le adeuda el Ayuntamiento, garantizando el abono de las nóminas a su plantilla y la continuidad de la sociedad.
La concejala responsable de Vivienda y presidenta de Suvipuerto, Matilde Roselló, ha puesto de manifiesto, una vez más, “la buena gestión que se ha realizado, y que se ha visto traducida en resultados positivos en cuanto a la situación económica de la empresa al llevar dos años seguidos cerrando en positivo y con tendencia a la baja en los índices de morosidad”.
“El Gobierno local continuará trabajando en esta línea con proyectos en los que ya se está poniendo todo el empreño por parte de las áreas implicadas como la puesta en marcha del observatorio de la vivienda, la realización del censo de viviendas vacías y turísticas, y el plan municipal de vivienda entre otras que debe afrontar Suvipuerto con una línea política marcada que pone por delante a las personas”, insiste esta edil de IU, añadiendo que “para nosotros la rentabilidad social está por encima de la rentabilidad económica; las personas siempre por encima de los números”.
El concejal de Economía, Antonio Fernández, se ha referido también a las palabras de la oposición, “cuando aseguran que lo hacen por los trabajadores”. Afirma que “es aquí precisamente donde también está la diferencia de nuestro modelo de gestión. Porque gestionamos pensando en la plantilla, pero también en las familias portuenses que no tienen recursos para acceder a una vivienda a través del libre mercado; pensando en el derecho a la vivienda y por su puesto en la viabilidad de una empresa pública que está asumiendo todas estas cuestiones sociales”.
Ambos responsables izquierdistas, en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, lamentan que el modelo de empresa pública de vivienda para la oposición sea “el de la especulación inmobiliaria” mientras que “nuestro modelo está siendo el de una empresa más justa y social, que apoye a los alquileres sociales y que ayude a solucionar los problemas que en materia de vivienda padecen nuestros vecinos como se ha demostrado al llegar a acuerdos con Adif e incluso en la futura compra de viviendas a través de los fondos de la EDUSI”.
“Gobernamos para la gente, mientras que ellos sólo piensan en el mercado, sus amiguetes y en sacar tajada vendiendo viviendas a fondos buitres”, consideran desde el bipartito PSOE-IU. En este sentido, Roselló insta a la oposición a “que dejen de criminalizar a los inquilinos, porque la mayoría paga su alquiler y tiene calendario de pagos”; mientras que Fernández ha aprovechado para dirigirse a PP y Cs: “que no quieran ir ahora de salvadores de la empresa por abstenerse en el pleno, porque estos grupos rechazaron estar en el consejo de administración de Suvipuerto y quienes no quieren estar dónde les pertenece no merecen ser servidores públicos porque dejan claro que solo quieren participar dónde y cuándo les interesa. En un ejercicio de irresponsabilidad jamás visto en 40 años de democracia”.
EL PP PROMETE CONVERTIR LA EMPRESA EN “SOLVENTE”
Mientras, desde el PP, por su lado, aseguran que han “desbloqueado” la situación que “han causado De la Encina y Roselló”. “No es lógico que la ideología del gobierno social y progresista haya llevado a Suvipuerto a una situación limite con nóminas de los trabajadores sin cobrar”, interpreta el concejal Germán Beardo.
Añaden desde esta derecha que han llegado a “un pacto” con los trabajadores de esta empresa municipal, con los que se ha comprometido a facilitar que se puedan pagar sus nóminas, pero “las decisiones que se tomarán con respecto a Suvipuerto cuando el PP gobierne en la ciudad, serán las de darle otro sentido a la empresa y convertirla en solvente para que así deje de tener déficit”.