Un pleno extraordinario del Ayuntamiento de El Puerto de Santa María, convocado para este miércoles 28 de abril, abordará la aprobación definitiva del Plan Especial de Protección y Reforma Interior del Casco Histórico y su Entorno (Peprichye), del que se viene hablando años.
A decir del alcalde, Germán Beardo, será “un momento histórico”, ya que la entrada en vigor de este plan supondrá “el inicio de la transformación del centro de la ciudad, tras 30 años de vacío normativo que impedía la viabilidad de muchas actuaciones”.
El documento, cuya tramitación se reiniciaba durante el pasado mandato con Gobierno local liderado por el PSOE, se eleva a aprobación definitiva ahora con un Ejecutivo de derechas, contando con todos los informes sectoriales preceptivos. Hasta una docena de administraciones han emitido sus informes favorables, además de las compañías suministradoras y de la administración local.
“En un momento como el actual, a pesar de la pandemia del Covid-19 que suspendió los trámites administrativos, se ha conseguido culminar la larga y compleja tramitación que requiere un plan de esta envergadura”, subraya el primer edil del PP, que además de agradecerle su trabajo a la actual concejala de Urbanismo, Danuxia Enciso, reconoce el “excepcional trabajo” por parte de Andrés Pérez Sánchez Romate, arquitecto adjunto de Planeamiento responsable del Peprichye y al propio equipo redactor Territorio y Ciudad, la empresa contratada al efecto, que “ha respondido en tiempo y forma”. Entre esos agradecimientos ni se alude al trabajo avanzado por el anterior bipartito de socialistas e izquierdistas.
“El Puerto celebra un pleno extraordinario para no dilatar ni un segundo la aprobación definitiva, teniendo en cuenta que este Plan Especial será el dinamizador esencial para que el centro de ‘la ciudad de los Cien Palacios’ comience su recuperación, protegiendo su historia y su patrimonio y potenciando el crecimiento sostenible”, repite Beardo.
“Cumplimos así –subraya- con una reivindicación histórica de la ciudad, largamente esperada que ahora se materializa con la aprobación definitiva de este documento vital para que El Puerto y su centro comiencen el proceso de rehabilitación, para que vuelva a repoblarse no sólo de residentes sino también de actividades económicas, culturales, sociales, administrativas y lúdicas, en un necesario equilibrio de usos que fomenten su completa revitalización”.
El alcalde destaca que este “reto” incluido en la hoja de ruta del equipo de Gobierno de PP y Cs como “uno de sus principales objetivos”, permitirá que la localidad “vuelva a tener un centro lleno de vida y de actividad”, que se reforzará con otros proyectos importantes ya cocinados durante el anterior mandato y gracias a fondos europeos, como el Pasillo Amable, el desarrollo del Paseo Fluvial para que el río Guadalete se integre en la ciudad, la rehabilitación completa del Hospitalito como museo, el futuro Museo de Cargadores a Indias con la rehabilitación del Palacio Araníbar o las actuaciones previstas en la plaza de la Pescadería, con la futura expropiación del bloque de viviendas que todavía queda, así como el edificio ‘El Resbaladero’ y las pasarelas peatonal y de tráfico rodado que permitirán la integración de ambas márgenes del río en el casco histórico, “entre otros proyectos públicos y privados que rehabilitarán casas palacios y pondrán en valor edificios de legado histórico”.
Reconoce que el Peprichye “no es el punto final” sino “el pistoletazo de salida para que el casco histórico vuelva a repoblarse”. Y recuerda que este plan es redactado por imperativo de la Ley de Patrimonio Histórico, como consecuencia del Real Decreto que declaró en 1981 conjunto histórico artístico el centro portuense.
“EL GOBIERNO ANTERIOR DEJÓ HECHO EL 95% DE ESTE PLAN”
“Cuando llegamos en junio de 2015 no había prácticamente nada, por lo que tuvimos que recuperar mucho tiempo perdido y nos volcamos en esa ansiada recuperación del centro histórico”, añade a su vez el exalcalde y secretario local del PSOE, David de la Encina, que ensalza “la enorme labor realizada durante el gobierno socialista (junto a IU, al frente de Urbanismo en los primeros años), que fue decisiva para en tan solo cuatro años lograr la aprobación provisional, es decir, que creamos la estructura y dejamos todo prácticamente redactado del necesario Peprichye, de cuya aprobación definitiva nos congratulamos”.
Desde el ahora principal partido de la oposición se insiste en que “la tramitación urbanística es extraordinariamente compleja y lenta, pero en nuestros cuatro años de gobierno avanzamos como jamás se había hecho y dejamos aprobado inicialmente el documento que prácticamente es el mismo que ahora viene a obtener la aprobación definitiva”. De hecho, se añade, “a criterio de muchos, el ritmo en estos dos años últimos ha sido excesivamente lento, y bien pudiera haberse llegado a esta aprobación mucho tiempo antes”. “Todos los partidos tenemos claro que el Peprichye es fundamental, pero el PP no ha sido precisamente rápido, cuando lo poco que tenían que hacer era llevar a aprobación definitiva el texto”.
Para De la Encina “tampoco es justo el actual alcalde cuando se olvida o parece olvidarse de la intensa labor desempeñada por los concejales de Urbanismo Antonio González, Ángel Quintana o Eugenia Lara, así como profesionales como Bernardo Sancho, Javier López, quienes junto a profesionales externos de la talla de José Manuel Morales, trabajaron codo con codo con el personal técnico de Urbanismo e hicieron posible que este plan llegase a 2019 prácticamente culminado”.
Para el PSOE, “ahora el reto es materializar la reactivación del centro con refuerzos de personal en el área de Urbanismo e inversiones”. En este punto, el edil socialista Enrique Báez apostilla que “esto no debe quedarse solo en la aprobación, sino que se debe intensificar el trabajo para conseguir que el casco histórico se ponga en valor, atrayendo población e inversión, lo cual redundará en la reactivación económica, la solicitud de ayudas y la atracción de inversiones para rehabilitar el patrimonio existente, en definitiva, para que el centro de nuestra ciudad vuelva a tener el esplendor que antaño tuvo”.
En respuesta al PSOE, el secretario general del PP local y concejal de Presidencia, Javier Bello, le exigile a De la Encina que “busque la dignidad que le queda, si es que la encuentra, y que deje de mentir”.
“Por si tiene lapsus de memoria”, afirma este edil de derechas, el Peprichye por aprobar “tiene el sello del actual equipo de Gobierno que ha demostrado en 22 meses, con 14 de pandemia, que sí tiene capacidad para gestionar y cambiar el rumbo de la ciudad. Talento que ellos en cuatro años no han demostrado ni en esta cuestión ni en otras muchas que ahora tratan de apropiarse, cuando deberían estar aplaudiendo como oposición responsable un hito histórico de esta envergadura que pone fin a tres décadas de espera”, opina. Y añade que “en cuatro años del gobierno del PSOE consiguieron una aprobación inicial, la segunda, in extremis y ni siquiera les dio tiempo a publicarlo”.
“RECUPERAR EL SENTIMIENTO DE SER PORTUENSE”
Más allá del “ámbito practico” de este documento, el concejal de Unión Portuense, Javier Botella, que ya ha adelantado que votará a favor en el plano, asegura que este Peprichye “debe servir para recobrar la recuperación emocional e identitaria de ser portuense. El casco histórico, debe constituirse en el nexo común que sirva para volver recobrar, un sentimiento que lleva muchos años adormecido, que no debemos permitir por más tiempo y que no debe ser otro, que volver a sentir el orgullo de pertenencia a nuestra ciudad”.
“El Peprichye llega con diez años de retraso y, además, viene repleto de incógnitas que el gobierno de Beardo no ha explicado a la ciudadanía. Una de ellas es el posible impacto de una más que probable caída definitiva del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) en vigor, el cual, aunque son documentos independientes, tienen relación directa”, agregan desde esta formación minoritaria de la oposición.
Otro de los problemas que se deben abordar de manera urgente, es la evidente falta de recursos humanos para gestionar este importante documento. Si no se dota de personal apropiado al Área de Licencias y a la de Planeamiento, la aprobación del Peprichye “será una carga más y un embudo burocrático en la ya saturada área de Urbanismo”. Por ello, Botella propone la creación de una oficina especifica de gestión técnica dotada de personal cualificado.
