La Policía Nacional ha asistido a un vecino de El Puerto de 75 años que había sufrido un ictus mientras se encontraba solo en su domicilio. Después de que su hija solicitara ayuda, acudieron al lugar dos dotaciones policiales que accedieron a la casa y evitaron que el hombre se asfixiara con su propia lengua y fluidos.
La Policía Nacional ha asistido a un vecino de El Puerto de Santa María de 75 años de edad que había sufrido un ictus mientras se encontraba en su domicilio en estado de semi inconsciencia. Después de que su hija solicitara ayuda a través del 091, acudieron al lugar dos dotaciones policiales que accedieron a la casa y evitaron que el hombre se asfixiara con su propia lengua y fluidos.
La Sala Operativa del 091 recibió una llamada en la madrugada del pasado 22 de diciembre donde una mujer informó que temía que a su padre le hubiera pasado algo, tras intentar ponerse en contacto con él sin conseguirlo y habiendo, previamente, recibido varias llamadas suyas.
Dos indicativos de los Grupos de Atención al Ciudadano, se relata en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, se desplazaron hasta el domicilio de dicha persona donde los agentes se vieron obligados a saltar un muro para acceder a un patio posterior de la vivienda, observando a un hombre que se encontraba sobre la cama echando espuma por la boca.
Los agentes, ante tal situación, decidieron romper la puerta de entrada para auxiliar a esta persona, que tenía las vías respiratorias obstruidas por sus propios vómitos, por lo que para liberarlas, le colocaron en la posición lateral de seguridad.
El equipo sanitario le trasladó al Hospital de Puerto Real donde el servicio médico de Urgencias confirmó que esta persona había sufrido un ictus y que había sido determinante la actuación de los policías.
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