CRÍTICA. La historia nos cuenta cómo, durante una misión de rescate en el espacio, uno de los miembros de los X-Men (Jean Grey) es alcanzado por una misteriosa fuerza cósmica. Lejos de matarla, esa radiación ha multiplicado sus dones, pero la ha hecho incapaz de controlar todo el alcance de sus poderes. De esta forma, Jean tiene miedo de llegar a hacer daño a aquellos a quien más ama. Solo los X-Men pueden enfrentarse a esta fuerza sobrehumana en su intento de salvar a Jean.
Después de que los vengadores dieran una lección sobre cómo concluir una saga por todo lo alto y a la vez desarrollar grandes historias paralelas sobre sus superhéroes, algunas de las cuales han resultado en sagas por ellas mismas (Iron Man, Thor, Hulk, Dr Extraño, Pantera Negra, etc.), uno no puede evitar hacer comparativas. Y es que tal vez la productora Disney esté intentando hacer en X-Men algo similar, al centrarse en un personaje del grupo y desarrollar su historia. Y este es un fallo ya que hay muchos otros protagonistas que se quedan en el tintero y que siempre están relegados a un segundo plano (¿alguien sabe algo del personaje de Tormenta, el Rondador Nocturno, etc?).
Puede que la trama deba avanzar más rápido y ver (como en la trilogía inicial) varias historias desenvolviéndose a la vez, de forma que el espectador siempre pueda encontrar una de ellas con las que simpatizar más y centrar su interés. Si, en este caso, el personaje de Jean Grey no te resulta interesante, no podrás encontrar una historia afín y que te entretenga en las casi dos horas de metraje.
‘X-Men: Fénix Oscura’, sin embargo, encuentra su bote salvavidas en las escenas de lucha, con excelentes efectos especiales y coreografías. Esto, en ocasiones, consigue tapar un guión pobre en el que se ha pensado que incluyendo algunas salvas feministas y roles de mujeres teóricamente fuertes conseguirían ganarse al público… pero este no siempre pica esos anzuelos envenenados.
— Lo peor: El poco desarrollo de algunos personajes a expensas del de Phoenix/Jean Grey.
— Lo mejor: La genial secuencia de la pelea en el centro de la ciudad, con la aparición del metro y sus pasajeros incluidos como arma de ataque. DIARIO Bahía de Cádiz