El Ayuntamiento de Chiclana aprobaba a finales de 2023 el plan de explotación de playas 2024-2027 (que incluye todos los servicios, eventos y actividades que se desarrollan en la misma), incorporando como gran novedad una playa para perros en la zona de Lavaculos, junto al espigón. El documento fue remitido a la delegación territorial de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul de la Junta de Andalucía, administración que debe dar su visto bueno.
En el transcurso de esta tramitación, desde la administración autonómica se ha sometido a información pública dicho plan, y Toniza Ecologistas en Acción no ha desaprovechado este plazo para presentar sus alegaciones al mismo.
Estas alegaciones, según se detalla en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, abordan numerosos temas relacionados con las playas chiclaneras “como su capacidad de carga, la ocupación de chiringuitos, la distancia entre chiringuitos, las pasarelas, el sistema dunar, los movimientos de arena, la educación ambiental, el riesgo de tsunami y la playa canina, entre otros”.
De entrada, esta asociación verde se queja de que no se ha realizado ni consultado ningún estudio de “la capacidad de carga” de La Barrosa y de Sancti Petri que incluya el grado de saturación de cada tramo para realizar el plan de explotación. En función de este estudio “deberían proponerse medidas paliativas”.
“Nos gustaría que se incluyera en el documento un capítulo destacado dedicado a la protección medioambiental de nuestras playas”, se remarca; al tiempo que se recomienda realizar un estudio del aforo de las bolsas de aparcamiento a lo largo de la playa y zonas contiguas “de forma que se tenga en cuenta que se trata de una zona vulnerable antes de aprobar nuevos aparcamientos”.
En cuanto a los animales, Toniza incluye varias propuestas: que se permita la presencia de perros y caballos en las playas durante la temporada de baño en horario de diez de la noche a nueve de la mañana y, sin restricción horaria en invierno. Además, demanda que se habiliten y se acoten dos franjas (una en la playa de Lavaculos y otra en La Barrosa) para la presencia y permanencia de éstos sin restricción horaria durante el verano.
Por otro lado, se insta a que este plan incluya indicaciones “sobre las vías de evacuación y recomendaciones en caso de tsunami”. También se pide conocer “en qué medida se ha considerado la variable del cambio climático en la propuesta municipal puesto que el Plan no hace mención alguna”.
E igualmente, se aprecia que el documento debería contemplar información relativa a proyectos de aportación de arenas en las playas en el periodo de vigencia del plan, incluido el presupuesto estimado para las actuaciones. En todo caso, Ecologistas en Acción aprovecha para volver a mostrarse contraria a las aportaciones de arena a las playas, de forma general.
OCUPACIÓN DE LAS PLAYAS Y CHIRINGUITOS
En otro sentido, entre las alegaciones se considera que la ocupación de las playas del municipio “no está correctamente cuantificada e identificada” puesto que excluye las ocupaciones de lavapiés, duchas, baños, puestos de socorro etc., del cómputo total y no diferencia entre temporada de baño y fuera de ella.
Además, haciendo una visualización sobre fotos aéreas, Toniza dice observar que, a priori, “no siempre se cumple ni la ocupación máxima ni la distancia permitida entre establecimiento”, según lo recoge la normativa de Costas. En lo relativo a la ocupación rebasan la máxima permitida: Santorini (332 m2), Mojama Beach (319 m2), Serena Beach Club (314 m2), Chiringuito Arena Bay Club de Mar (313 m2) y Coconovo Beach (348 m2).
En sus alegaciones, se demanda que se aporte la “ocupación exacta” de estos chiriguitos en metros cuadrados diferenciando entre ocupación cerrada y terraza abierta. También que se identifiquen las instalaciones que se desmontan terminada la temporada de verano y aquellas que pueden permanecer todo el año, aspectos no reflejados en el plan de explotación que el Ayuntamiento espera que se apruebe. Y de la misma manera, se pide que se incluya la información sobre los usos de los establecimientos que se encuentran en las playas, si son de uso público o privativo y en qué régimen.
SISTEMAS DUNARES SIN PROTECCIÓN
Respecto a los sistemas dunares, “ecosistemas costeros frágiles y, por lo tanto, necesitan protección”, el plan de explotación “se excusa en que ninguna de las playas chiclaneras forman parte de Red Natura 2000”; sin embargo, precisan los ecologistas, “hay varios espacios en las playas recogidos con alguna categoría como son los Hábitats de Interés Comunitario y especies protegidas”.
“No solo no se hace mención a la protección de dunas y especies dunares, sino que además observamos con pesar que hay dos establecimientos que están en lo alto de una duna, el Santorini/Albarrosa y el Mojama Beach”. En las alegaciones presentadas se insta a que se reubiquen estos chiringuitos “para que las dunas puedan seguir desempeñando su principal función ecosistémica”.
Además, se ha instalado una pasarela para dar acceso al chiringuito Coconovo Beach, “que, literalmente, ha cortado una duna para facilitarle su acceso”. “Es incomprensible que se haya efectuado esta tropelía medioambiental a pesar de que, a pocos metros y de manera privilegiada, hay un acceso rodado hasta la misma playa y una pasarela que va desde la Torre del Puerco hasta la playa”. Por eso, se plantea que se desinstale esa pasarela “y se deje libre la duna sin obstáculos que le impidan acumular y devolver la arena a la playa”.
CARTELERÍA E INFORMACIÓN
Finalmente, las alegaciones presentadas por Toniza también hacen referencia a la falta de detalle del plan de explotación sobre la cartelería o información: “hay que recuperar los carteles informativos a las entradas de los accesos a la playa, recordando la importancia de cumplir las normas de protección ambiental. Es importante que se informe del valor de estos ecosistemas, el impacto que provoca el paso sobre las dunas, la biodiversidad que albergan… También que se anuncie la campaña de voluntariado ‘Salvemos al chorlitejo patinegro’”, se propone.
Se considera por otro lado que este plan podría proyectar para los próximos años talleres de regeneración dunar con plantación de barrones, azucenas marítimas, etc., y actuaciones de retirada de especies invasoras. Y se pide que las dunas tienen que incluir vallas para proteger la zona de repoblación o regeneración dunar, especialmente, en los meses de marzo a junio por la reproducción del chorlitejo patinegro.
Y otro aspecto señalado son los accesos a las playas. El plan del Consistorio denomina pasarelas a todos los accesos, algunos sin señalizar y otros apenas entarimados enterrados en la arena: “pedimos que todos los accesos que forzosamente tengan que cruzar una duna lo hagan por pasarelas elevadas para no obstaculizar la acumulación y el transporte de arena”.