La consejería de Medio Ambiente de la Junta ha liberado 60 kilos de angulones en el río Iro, a su paso por Chiclana, para ampliar el hábitat de la especie en la parte baja del río e incrementar así sus poblaciones. De esta manera se pretende que los ejemplares que ya han llegado a su madurez sexual puedan migrar hacia el océano Atlántico para su reproducción. Se persigue recuperar y garantizar los hábitats y poblaciones de la anguila europea en Andalucía.
La consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía ha liberado cerca de 60 kilos de angulones en el río Iro, a su paso por Chiclana, para ampliar el hábitat de la especie en la parte baja del río e incrementar así sus poblaciones. De esta manera se pretende que los ejemplares que ya han llegado a su madurez sexual puedan migrar hacia el mar de los Sargazos (en el océano Atlántico) para su reproducción.
La suelta de estos angulones se ha llevado a cabo en distintos puntos del río, desde el casco urbano en dirección a su nacimiento. En ella han participado técnicos de la Agencia de Medio Ambiente y Agua de la consejería, el responsable del Parque Natural Bahía de Cádiz, Antonio Gómez, así como técnicos de la concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento, con su edil responsable Joaquín Páez a la cabeza.
Al respecto, el director del Parque Natural ha destacado que “el parque está muy interesado en la recuperación de la anguila, ya que se trata de una especie autóctona de nuestras marismas y objetivo de cultivo piscícola, con un alto valor comercial”. “Estamos muy contentos por el hecho de que el Plan de la Anguila actúe en el río Iro, afluente de las marismas”, ha indicado Antonio Gómez, quien confía en que “estos miles de ejemplares maduren en un adecuado porcentaje y, una vez se reproduzcan, puedan volver a esta zona”.
Por su parte, el concejal de Medio Ambiente ha mostrado su satisfacción por la puesta en marcha de esta iniciativa en el Iro, “ya que habla de un río más saludable, más sostenible y más rico”.
“Por si fuera poco, estamos hablando de una especie que se comercializa y que tiene mucho éxito en países como Japón”, ha añadido Páez, quien entiende que, “si todo sale bien como así esperamos, a la larga nos puede aportar un valor añadido al sector económico y a la pesca en la localidad”.
Estos angulones fueron capturados como angulas en el Bajo Guadalquivir y trasladados posteriormente al Centro de Cría y Conservación de Peces Amenazadas que la Junta tiene en Los Villares (Córdoba), con el objetivo de reintroducirlos posteriormente a ecosistema natural una vez que alcanzan el tamaño exigido, alrededor de los 12 centímetros. En el plazo de año y medio, los técnicos de la Junta de Andalucía volverán a Chiclana a comprobar el resultado de este proyecto.
Esta iniciativa se enmarca dentro del programa que desarrolla la administración regional para recuperar y garantizar los hábitats y poblaciones de la anguila europea en Andalucía. Con esta actuación, se da cumplimiento a lo dispuesto en el Reglamento europeo para la recuperación de la población de anguila europea, especie catalogada en ‘peligro crítico’ por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
El objetivo principal del Plan de Gestión de la Anguila se dirige a garantizar un escape mínimo hacia el mar del 40% de las anguilas adultas, para que puedan completar así un ciclo biológico que comienza con la entrada a los ríos como angulas, procedentes del mar de los Sargazos, y concluye con la vuelta a aguas marinas y su reproducción en esa zona del Atlántico central.
Desde el año 2011, según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz, la Junta ha realizado actuaciones dirigidas a la recuperación de esta especie, como la repoblación de diversas cuencas andaluzas, la determinación del estado epidemiológico de la población de anguilas andaluzas, estudios de reclutamientos de alevines y productividad de biomasa en las Cuencas Hidrográficas o Unidades de Gestión de la Anguila (UGAs), entre otras.
Para el desarrollo de este plan, la consejería de Medio Ambiente cuenta con el asesoramiento científico del departamento de Zoología de la Universidad de Córdoba.
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