El monumento ‘en homenaje al trabajador en bicicleta’ en Chiclana ha sido reinaugurado en su nueva ubicación: la plaza de Andalucía, remodelada gracias a las obras de implantación del futuro tranvía metropolitano.
Así, el alcalde, José María Román, acompañado de la concejala de Vías y Obras, Cándida Verdier; el edil de Medio Ambiente, Joaquín Páez; y el de Fomento, Adrián Sánchez; y el autor de la obra, José Antonio Barberá, ha presentado el monumento en su nuevo emplazamiento. Barberá fue el escultor de la persona que compone la estatua, mientras que la bicicleta fue obra de Capicho.
En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, el primer edil socialista explica que hubo que quitar esta escultura durante la obra del tranvía “y a la finalización de ésta ya era imposible colocarla donde estaba, debido a las vías”. “Dejarla allí desluciría el significado de este ‘ciclista’ y luego se pensó en que el mejor lugar sería este, mirando para la carretera, un lugar céntrico y urbano, que era un punto de encuentro de los trabajadores”. El alcalde también ha agradecido el trabajo realizado por los artistas, porque “ahora muchos de los que pasen por aquí se verán reflejados y van a recordar lo que vivieron ellos mismos o lo que sus padres les contaron”.
Por su parte, José Antonio Barberá ha destacado que, este nueva ubicación está muy relacionada con la escultura en sí, puesto que es el punto en el que se encontraban todos los trabajadores para partir con dirección al punto de trabajo: “aquí es donde tomaban café y donde esos trabajadores pedían a otras personas que les dieran un “empujoncito” para emprender la marcha y poder tirar de toda la mercancía que llevaban”.
Este ‘ciclista’ ocupaba un espacio en la entrada de la localidad por la avenida del Mueble (en la rotonda de la Venta Agustín), pero las obras del tranvía obligaron a cambiarlo de lugar. Así pues, ahora es un protagonista más en esta plaza de Andalucía, una vez finalizadas dichas obras.
Este monumento inmortaliza al trabajador chiclanero “en el que se dignifica el esfuerzo de tantos hombres de este pueblo que tuvieron que echar mano de la bicicleta para trabajar en la Bahía gaditana”. Fueron años duros en los que la viña, la huerta o la salina no eran rentables y pasaban por una gran crisis. Sin embargo, en la comarca la construcción naval y la de la construcción estaban en expansión. En 1963, la comparsa ‘Los corrusquillos gaditanos’, de Paco Alba, ya en su pasodoble hacía mención a estos chiclaneros.