El alcalde de Chiclana y su concejala de Urbanismo y Diseminado han comprobado in situ el desarrollo de las obras y dotación de servicios básicos previstos en el proyecto de urbanización del ámbito Soto del Águila (incluido en el 8 ARG-ME Menuditas) que permitirá que un total de 114 parcelas pueda acogerse al proceso de regularización y disponer de los servicios de luz, agua, alcantarillado y pluviales y alumbrado público, tal y como está previsto en la ordenanza de Regularización.
Una visita en la que José María Román y Ana González han estado acompañados por el arquitecto Israel Quintero, así como los representantes de la empresa encargada de la obra y vecinos.
Los trabajos están previstos que se desarrollen hasta final de año, con el objetivo de que en el mes de diciembre estén ejecutadas todas las actuaciones (la dotación de los servicios básicos, así como alumbrado público, además del acerado y asfaltado de las calles).
“Estamos hablando de una actuación muy importante dentro de las áreas de regularización de los suelos urbanos no consolidados, que permitirán que más de un centenar de propietarios pueda disfrutar de todos los servicios básicos y regularizar sus viviendas, muchas de ellas construidas hace ya más de 30 años”, agrega el alcalde, quien resalta “la firme apuesta de los vecinos de Soto del Águila por normaliza su situación urbanística y poder contar con todos los servicios”.
En la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz se recuerda que hace más de dos años desde la Asociación de Vecinos Soto del Águila, ubicada junto a la carretera de La Barrosa, entre la rotonda de Las Menuditas y la Escuela Montessori, se presentó en el Ayuntamiento el proyecto de delimitación del ámbito preferente de ejecución del área de regularización e integración urbano-ambiental de Las Menuditas. Asimismo, a finales de 2020 se aprobó inicialmente el proyecto de urbanización que, tras los correspondientes trámites de exposición pública, se aprobó definitivamente el pasado mes de abril, dando comienzo a las obras en las calles.
Este ámbito incluye un total de 114 parcelas, en su gran mayoría construidas ilegalmente, de las 135 existentes en la zona, lo que supone una extensión de más de 63.000 metros cuadrados, de los cuales 13.758 m2 son de viales y el resto de suelo residencial. Además, la amplia mayoría de las parcelas tiene una superficie de 300 m2, aunque también existen parcelas de 1.000 m2.
“Es una zona muy próxima al suelo urbano consolidado y que, en su mayoría, cuenta con parcelas con construcciones, puesto que el 80% de las propiedades existentes ya cuentan con una vivienda”, puntualiza el primer edil socialista.