La empresa municipal Emsisa vuelve a poner en marcha en Chiclana su programa de rehabilitación de comunidades vecinales, su quinta convocatoria desde 2017.
Entre las novedades se incluyen que se admiten obras para la reparaciones relacionadas con la seguridad estructural y accesibilidad; se incrementa los tramos de los importes máximos de ingresos por unidades familiares; se incrementa el importe para la redacción de informes técnicos y de redacción de proyectos, estudios de seguridad y salud, de dirección de obra y de coordinación de seguridad y salud; se incrementa la limitación de subvención por vecino, en función de los ingresos (pasando de 2.000 euros a 5.000 euros por vivienda); y se elimina el requisito de que al menos el 75% de su superficie construida sobre rasante tenga uso residencial de vivienda.
Además, se suprime el plazo de presentación de solicitudes, por lo que el programa queda abierto para todo lo que resta de 2024. De esta forma, a medida que vayan registrándose interesados en la ayuda, se irán gestionando y tramitando.
Los requisitos para que las comunidades de propietarios puedan acogerse a estas ayudas del Ayuntamiento son que los edificios deben estar ubicados, lógicamente, en Chiclana; no estar calificados urbanísticamente como fuera de ordenación o en situación de asimilado en régimen de fuera de ordenación (no ser ilegales); su construcción debe haberse finalizado antes de 2004; contar con la licencia de obras municipal para la intervención; y presentar unas condiciones de seguridad estructural y constructiva que garanticen la viabilidad de la intervención. Además, el edificio habrá de contar con un informe técnico sobre su estado y no podrá iniciar las obras con carácter previo a la solicitud de la ayuda.
Por otro lado, se remarca en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, todos los vecinos de la comunidad solicitante tendrán que cumplir, a su vez, una serie de requisitos, entre ellos: ser mayores de edad, ostentar la propiedad de la vivienda que ocupan o ser arrendatarios de la misma, estar empadronados en la vivienda, no ostentar la propiedad ni derecho real sobre otra vivienda distinta a la que será objeto de rehabilitación y acreditar los ingresos de todos los miembros de la unidad familiar que están empadronados en dicha casa.
“UN PROGRAMA MUCHO MÁS ABIERTO”
En la presentación de la convocatoria (AQUÍ, completa), el alcalde José María Román, respaldado por su concejal de Vivienda, Francis Salado, ha incidido en que “uno de los temas más importantes a nivel municipal es la política de vivienda y este Ayuntamiento se está significando por distintos programas, que están ayudando a resolver, en parte, la problemática existente”. Al respecto, ha apuntado a “las 110 viviendas del programa Ciconia, las 18 en construcción en La Cucarela, las 47 previstas próximamente allí mismo o las 24 de El Pilar, que se licitarán antes de final de año, sin olvidar la instalación de ascensores en viviendas públicas y privadas o las mejoras en distintas barriadas”.
“Y otro de los programas más importantes es el del mantenimiento de comunidades de vecinos, porque nos encontramos con bloques de viviendas en mal estado y de los 15 ó 20 vecinos algunos de ellos no tienen posibilidades económicas para arreglarlo. Y es ahí donde aparece este programa de rehabilitación de comunidades, que en esta quinta convocatoria hemos relajado las normas para que pueda llegar a un mayor número de familias”, ha comentado el primer edil socialista.
Además de este programa de ayuda a la rehabilitación de comunidades, el Ayuntamiento sigue trabajando para la adquisición de viviendas abandonadas en el centro para ponerlas en carga, así como para la compra de solares en el casco histórico. Y se sondea la regulación de viviendas turísticas, para que éstas se limiten a la Chiclana residencial y no al casco urbano.
LAS CONVOCATORIAS ANTERIORES
Este programa de ayudas a la rehabilitación de comunidades se puso en marcha en 2017, y hasta su última convocatoria ha ayudado a varias comunidades con unos 118.000 euros.
Así, en la primera convocatoria se beneficiaron los vecinos de la barriada de Las Marismas, que percibieron 36.200 euros de ayudas de los casi 100.000 euros que costaron las obras de actuación en los 10 bloques de viviendas, que se distribuyen en dos manzanas de cinco bloques cada una y cuya construcción finalizó en 1979.
En la segunda convocatoria, en la barriada Pintor Federico Godoy, de las 50 solicitudes presentadas, fueron concedidas 24 por un importe de 11.395 euros. En Huerta del Retortillo, de las nueve solicitudes, se concedieron seis por valor de 4.854 euros. En la avenida de La Libertad, de las siete solicitudes, fueron otorgadas cuatro por valor de 6.564 euros. Y en la Plaza Mayor, las cuatro solicitudes fueron concedidas por valor de 4.347 euros.
En la tercera convocatoria, se beneficiaron de estas ayudas de Emsisa las urbanizaciones Huerta El Retortillo bloque 3, de 16 viviendas, y calle Álamo 11, con 12 viviendas y dos locales comerciales. El total de la ayuda ascendió a casi 16.000 euros.
Y en la convocatoria del pasado año, 27 fueron las familias que se beneficiaron de estas ayudas, ascendiendo a casi 38.300 euros. En concreto, las beneficiarias correspondían a edificios de la carretera de Fuente Amarga, calle Bailén y urbanización La Florida.