Ecologistas en Acción, a raíz del informe supuestamente ocultado por la concejala de Vías y Obras al alcalde sobre la contaminación de los acuíferos, reclama la colaboración entre todas las administraciones con competencias en el problema de las viviendas ilegales en Chiclana “para poner fin a esta intolerable amenaza sobre la salud”. La existencia de más de 3 millones de metros cúbicos de aguas fecales sin atisbo de depuración alguna “es una auténtica bomba de relojería ambiental que en cualquier momento puede ocasionar infecciones e intoxicaciones severas”, se alarma.
Ecologistas en Acción reclama la colaboración institucional entre todas las administraciones con competencias en el problema de las viviendas ilegales en Chiclana y del estado de los acuíferos, Junta de Andalucía y Ayuntamiento, “para poner fin a esta intolerable amenaza sobre la salud”.
“La situación provocada por la existencia de más de 18.000 viviendas sin atisbo de depuración de sus aguas residuales, un diseminado ilegal consentido por todas las administraciones, ha estallado a raíz de un informe que el Ayuntamiento había mantenido oculto hasta ahora”, afirma este colectivo, refiriéndose a ese controvertido estudio municipal que le ha costado el cargo a la concejala de Vías y Obras, Susana Moreno, pese a que ella asegura que el alcalde, Ernesto Marín, estaba al tanto de su desarrollo y sus conclusiones y que pese a ello, este optó por no hacer nada.
Ecologistas, en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, lamenta que a partir del conocimiento de esta situación “han surgido las consabidas respuestas de las autoridades, recurriendo de nuevo a ‘no es mi competencia’ o ‘no hay alerta sanitaria’”. Sin embargo, “ninguna de estas afirmaciones son ciertas: la consejería de Medio Ambiente está obligada a controlar y gestionar la calidad de las aguas subterráneas y el Ayuntamiento tiene que velar por la salud de sus ciudadanos. ¿En base a qué el delegado del Gobierno andaluz, Fernando López Gil, se atreve a postular que no hay ninguna emergencia sanitaria?”, se pregunta la asociación conservacionista.
La existencia de más de 3 millones de metros cúbicos de aguas fecales sin atisbo de depuración alguna “es una auténtica bomba de relojería ambiental que en cualquier momento puede ocasionar infecciones e intoxicaciones severas”, se alarma. “Son 53.000 vecinos los que viven sobre un acuífero gravemente contaminado y aunque sea vox populi que esas aguas no se pueden beber, la posibilidad de enfermedades gastrointestinales no puede ser descartada. Además, los nitratos procedentes de la acumulación de esta enorme carga de fracción orgánica se pueden convertir en nitritos, estos sí cancerígenos”, se agrega.
“El informe es contundente al asegurar que el acuífero está ‘completamente contaminado por nitratos y coliformes de origen fecal’, por lo que estamos ante un ‘problema sanitario generalizado’, sentencian desde Ecologistas en Acción.
Al respecto, se exige la publicación del citado informe y de las analíticas que evidencian la contaminación del agua subterránea; la adopción de medidas de regulación urbanística “aplicando la disciplina, y ejecutando las necesarias obras de acometida para aguas potables y de saneamiento a cargo de los vecinos”; la colaboración institucional entre todas las administraciones con competencias en el problema; e identificar las situaciones más graves de contaminación difusa del acuífero, acotando el foco del problema y ejerciendo las imprescindibles labores de vigilancia, control y corrección.
Yo bebo agua del grifo en mi casa ilegal, sin regularización, sin abonar Ibi al Ayuntamiento,con la luz enganchada de forma autónoma,sin pagar recibos de luz,no abono las tasas de basura y alcantarillado y contamino el acuífero, el subsuelo y defraudo a hacienda todos los años.
Anda Ramoncin,que cara tienes.