La Policía autonómica ha llevado a cabo su enésima intervención en la provincia gaditana contra la lotería ilegal: en concreto, ha intervenido en Chiclana 16.583 boletos de la llamada Organización Impulsora de Discapacitados (OID), además de 1.028 euros para el pago de premios y un ordenador portátil.
La intervención se produjo el lunes día 24 una vez constatada la venta de estos boletos por pequeños vendedores. Así, se establecieron los dispositivos de vigilancia oportunos para detectar la distribución de los mismos y, finalmente, se llevó la identificación de dos personas que portaban una maleta que contenía estos cupones de la OID, así como el dinero y dicho material informático.
Las personas identificadas se dedican, presuntamente, a la distribución de la lotería entre los vendedores finales y al pago de premios menores. Los agentes han constatado que los boletos intervenidos eran la cantidad necesaria para la venta correspondiente al periodo entre el 24 al 31 de agosto, ambos inclusive, en la propia localidad de Chiclana.
El material intervenido ha sido puesto a disposición del servicio de Juegos y Espectáculos de la delegación de Gobierno de la Junta de Andalucía en Cádiz al efecto de la instrucción del correspondiente expediente sancionador.
Esta operación, subrayan desde la Unidad de Policía Adscrita a la Junta en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, se suma a sus intervenciones realizadas, especialmente en Cádiz entre 2019 y principios de 2020, en las que se intervinieron más de 350.000 boletos de esta reincidente organización, y se clausuraron hasta sus sedes.
La OID, han repetido desde la Junta en anteriores ocasiones, es una organización que no cuenta con autorización, ni a nivel nacional ni a nivel autonómico, para emitir ni distribuir esta lotería dado que carece de licencia administrativa. Y es que “esta organización se ampara en su carácter presuntamente social”, aunque las numerosas actuaciones realizadas por la policía autonómica “ponen al descubierto que no hay evidencias de que los vendedores del ‘cupón de OID’ sean realmente discapacitados”. Además, “trabajan habitualmente sin ningún tipo de contrato y sin estar dado de alta en Seguridad Social”.