Con el objetivo de ofrecer “mayor comodidad” a los viajeros frente al frío, calor o lluvias, el Ayuntamiento va a invertir 1,3 millones de fondos Next Generation en “dignificar” la estación de autobuses, creando una marquesina que abarca el propio apeadero, así como la parada de taxis en el extremo opuesto de la calle.
El modesto apeadero de autobuses de Chiclana, levantado por la Junta de Andalucía tras años de reclamaciones junto al río Iro (aprovechando fondos del proyecto del tranvía metropolitano), se ampliará y “dignificará” con una inversión de hasta 1,3 millones de euros de fondos europeos Next Generation.
Así, el Ayuntamiento acaba de aprobar en Junta de Gobierno Local el proyecto de mejora de este “intercambiador de transportes”, y el inicio del expediente para la contratación de dichas actuaciones.
Lo curioso es que estos nuevos trabajos supondrán una inversión mucho mayor que lo que costó levantar la estación de autobuses tachada de “parche” desde sus inicios, algo más de 235.000 euros.
La iniciativa, como se viene deseando prácticamente desde la inauguración del apeadero actual en la calle Paciano del Barco, se centra en cubrir mediante unas marquesinas esta infraestructura, que cuenta con seis dársenas de autobús y en el extremo opuesto de la calle una parada de taxis para diez unidades.
La solución planteada cubre los seis andenes y el módulo para la venta de billetes mediante tres marquesinas dispuestas a dos niveles de hormigón visto. Y en la parte trasera se ha proyectado un murete lineal que tiene una doble función, por un lado apoyo del cerramiento trasero compuesto por lamas verticales para el control solar y de los vientos y, por otro, cierre lateral de la jardinera.
De esta forma, mirando desde el río hacia el apeadero, el conjunto se divide en tres cuerpos, según se detalla en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz. Un cuerpo central destinado a venta de billetes, con una marquesina que mide 14,15 metros de fondo y 23,08 metros de ancho. El izquierdo, coincidente con cuatro andenes, consta de una marquesina de 9,5 metros de ancho y 71,74 metros de largo. Y el derecho, con una marquesina con la misma altura que la marquesina del cuerpo izquierdo y de 18,5 metros de largo. Y en relación a la parada de taxis, se proyecta como una marquesina similar a las de la parada de autobús, pero a menor escala.
“este Gobierno tiene una hoja de ruta bien definida con respecto a la movilidad y al tráfico”
En la presentación del proyecto, el concejal de Tráfico y Movilidad, José Vera, ha resaltado que “este Gobierno municipal tiene una hoja de ruta bien definida con respecto a la movilidad y al tráfico, marcada principalmente por el Plan de Tráfico y el Plan de Movilidad Urbana Sostenible, además de la Agenda 2030”. “Esas herramientas nos están permitiendo transformaciones físicas como este intercambiador del río Iro para dignificar esta infraestructura y cubrir a los usuarios de lluvias, vientos y sol”, ha añadido este edil socialista.
Considera además que “no se trata de acciones aisladas, sino que estamos trabajando de forma coordinada en actuaciones como el desdoble de calzadas en las principales vías, nuevas rotondas para mayor fluidez y seguridad en el tráfico, nuevos carriles menos 30 y menos 50 para disminuir el riesgo de accidentes mortales, ampliación de las líneas y bonificaciones a jóvenes y mayores en el transporte urbano colectivo, mejoras en el servicio del taxi con nuevas licencias, nuevos carriles bici, más bolsas de aparcamiento gratuitas, la nueva Alameda del Río, mejoras en cámaras de tráfico, nuevos radares, etc.”.
Afirma Vera que “antaño parece que colocar conos en un dispositivo de verano era la panacea y ahora existe una estrategia clara y definida en la movilidad”. “Somos conscientes de que hay mucho trabajo por delante aún y en ese ánimo seguimos también para remover conciencias en el uso de transportes más amables que el coche”.