Como era previsible, todos los partidos de la oposición en el Ayuntamiento de Chiclana han rechazado la subida del recibo del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) para 2020 en un 9%, abordada en un pleno extraordinario este martes junto a otras modificaciones de ordenanzas fiscales y tasas. Pese a ello, se ha aprobado de forma inicial con los votos suficientes de PSOE, Ganemos e IU, que suman mayoría en el Gobierno local, y que defienden que buscan “dar respuesta a las necesidades de la ciudad y de seguir mejorando los servicios públicos”. Con los socialistas igualmente en el Ejecutivo, en 2017, ya se incrementó este impuesto un 19%.
El concejal de Hacienda, Joaquín Guerrero, ha vuelto a repetir durante la sesión plenaria los argumentos ofrecidos días atrás al anunciar esta impopular subida de impuestos locales (a la que se ha opuesto frontalmente también la Asociación de Empresarios de Chiclana, tildándola de “desproporcionada y carente de justificación”).
“Este Gobierno municipal sí cree y sí quiere servicios públicos de calidad, y por supuesto va a acometer nuevas inversiones y a realizar políticas sociales, sobre todo, después de que hayamos sufrido una pérdida de 80 millones de euros en estos últimos años como consecuencia de la temeraria y populista bajada del IBI de un 29% por parte del Gobierno del PP en 2014, cuyo único objetivo era ganar las elecciones municipales del año siguiente”, ha incidido. Para este edil del PSOE, esta medida de la derecha ha provocado “un descuadre tremendo en las cuentas municipales y una pérdida sustancial de los servicios públicos”.
Esta modificación de las ordenanzas fiscales, que aún tiene que pasar por información pública y posterior aprobación definitiva, una vez se resuelvan las alegaciones que puedan presentarse, según el Gobierno tripartito, “supondrá que un recibo medio de 300 euros de IBI se incrementará en 27 euros para el próximo año”.
“No obstante –ha reiterado Guerrero para tratar de justificar la subida-, la presión fiscal aún sigue estando por debajo del año 2013, tal y como puede comprobarse en que una vivienda en una zona céntrica de Chiclana que pagaba en 2013 de IBI 612 euros, el próximo año pagará 557 euros, es decir, cerca de 60 euros menos que hace siete años. Y si otra vivienda por la zona de La Banda pagaba en 2013 un total de 989 euros de IBI, el próximo año pagará 917 euros, es decir, 75 euros menos que hace siete años”. En el mismo sentido, ha considerado que presión fiscal en la localidad “está por debajo de ciudades y pueblos de la provincia de Cádiz como El Puerto, Cádiz capital, San Roque, Tarifa, La Línea, Chipiona, Barbate, Conil, Setenil…”.
“Solo el que más tiene será el que contribuya más”, ha subrayado el concejal de Hacienda, antes de sentenciar que “toca actuar con responsabilidad porque necesitamos recursos para pagar las deudas contraídas por el PP con los bancos y porque necesitamos seguir mejorando los servicios públicos, además de llevar a cabo nuevas inversiones en la ciudad”.
“ESTÁN REPARTIENDO EL DINERO ENTRE LOS SUYOS Y PAGANDO FAVORES”
Por el lado de la oposición, la concejala del PP, Ascensión Hita, encargada de defender la posición de su partido y de repetir argumentos ya lanzados días atrás (“pacto por la pasta”, “están pagando favores a barrigas agradecidas y despilfarrando el dinero”, “están repartiendo el dinero entre los suyos y pagando favores”, “el PP basa su política económica en la bajada de impuestos”…), afirma que “hay una falta de justificación total por parte del PSOE, IU y Ganemos, pues han intentado ligar la subida de impuestos y tasas al pago de préstamos a proveedores, algo a lo que no se hará frente hasta 2021”.
Hita ha resaltado que la Asociación de Empresarios “también ha calificado de desproporcionada la subida del IBI y dice lo mismo que nosotros, que una subida de impuestos implica que seamos menos competitivos”; y ha sido crítica con el líder de IU y ahora concejal de Medio Ambiente, Roberto Palmero, “que hace tres años acusaba al PSOE y a Román de falta de lealtad por utilizar el rodillo de la mayoría absoluta para subir los impuestos a los chiclaneros. Nos queda claro que se ha ido Ana Rodríguez y ha desaparecido IU, que es otra marca más del PSOE, como Ganemos”.
Esta aprobación inicial de la subida del IBI y de otras tasas municipales deriva en que, según esta formación de derechas, “estemos ante un día negro para los chiclaneros, porque es una vergüenza que PSOE, IU y Ganemos suban de nuevo los impuestos y culpen al PP, cuando Román lleva casi seis años gobernando. Algo estarán haciendo mal”.
“DEMUESTRA UNA GRAN FALTA DE SENSIBILIDAD Y EMPATÍA CON LA GENTE”
En el caso de Podemos, su portavoz municipal, Jorge Guerrero, califica de “inaceptable” esta subida 9% (“demuestra improvisación, muy mala gestión y una gran falta de sensibilidad y empatía con la gente”), y recuerda que en 2017 ya se elevó un 19%, lo que hace que ponga en duda la buena previsión del Ayuntamiento en materia recaudatoria ya que consideran “irresponsable” hacer dos subidas en tres años: “ni siquiera se han cerrado aún las cuentas de 2018 ni se han proyectado los presupuestos de 2020 y ya saben que se necesita un aumento del IBI. Nos parece que tan solo responde a un afán recaudatorio, si no se han hecho los deberes ¿cómo saben que el Ayuntamiento necesita más dinero?”.
Se da la circunstancia, añaden desde la formación morada, de que “los valores catastrales tienen que ser revisados”, que es una cuestión que el alcalde socialista pactó realizar con la Asociación Por un IBI Real. “Ya se están pagando impuestos inflados y sin la revisión de los valores catastrales seguirá siendo así”.
Para Podemos, que propone recuperar la gestión de la recaudación (cedida a la Diputación) y “ser más eficaces en esta labor”, existen “otras vías para recaudar como por ejemplo aumentar hasta un 50% el IBI de inmuebles vacíos, que es una medida prevista en el ordenamiento y hay muchos pisos propiedad de bancos, aumentarlo para grandes hoteles, que sacan cuantiosos beneficios en nuestro municipio, o cobrar el IBI a la Iglesia”.
“2,5 MILLONES DE EUROS MENOS EN EL BOLSILLO DEL CIUDADANO”
En el caso de Ciudadanos, reclama conocer “qué va a hacer el equipo de Gobierno con los 2,5 millones de euros que va a recaudar (de más) con esta subida del IBI”, e incide en que hasta la fecha no se ha recibido información sobre los presupuestos de 2020 “ni se nos indica ninguna medida de control ni racionalización del gasto”.
A decir del portavoz naranja, José Ángel Quintana, el tripartito “no da argumentos que justifiquen estas subidas de impuestos, y muestra es ello es el voto unánime en contra de la propuesta”.
“No tenemos ningún inconveniente en apoyar al gobierno en las medidas que son buenas para Chiclana, pero lo que hemos visto en el pleno ha sido un insulto a la oposición”, ha incidido.
Para la franquicia de derechas, el impacto de la subida de este impuesto en la “realidad” de Chiclana es directo, “2,5 millones de euros menos en el bolsillo del ciudadano que no podrá gastar, por tanto, reducirá su consumo, no llegando al tejido comercial, hostelero e industrial de nuestra localidad”, ha interpretado.
“TENEMOS UN PUEBLO CADA VEZ MÁS ARRUINADO”
La asociación Por un IBI Real, ante este pretendida subida, entiende que “el alcalde no puede continuar asfixiando la economía familiar, la de los autónomos y a las pequeñas empresas de nuestra localidad”, para “pagar el derroche de que viene haciendo gala nuestro ayuntamiento en los últimos años”.
“No se puede sostener a costa de los ciudadanos –se afirma- la altísima nómina del alcalde, uno de los mejores pagados de España y el cuarto que más gana en Andalucía, la de sus asesores y enchufados subvencionados, o partidas para gastos anuales en publicidad cercana al millón de euros, para autobombo del PSOE”. Aunque a decir verdad es que en el actual mandato, José María Román cobra de la Diputación, no del Ayuntamiento.
Este colectivo interpreta que “tenemos un pueblo cada vez más arruinado, a pesar de que Chiclana ha pasado de recaudar 16 millones en IBI en 2014 a los 26 millones en 2019, y ahora con la nueva subida se pretende recaudar hasta los 29 millones para 2020”.
A decir de Por un IBI Real “la subida del 30% en el IBI en sólo tres años –tras la bajada del 29% de 2014-, con además unos valores catastrales de los inmuebles cuestionados por los tribunales e inflados al haber sido fijados en la época de la burbuja inmobiliaria, es la prueba plena de que se ha derrochado y gestionado mal el Ayuntamiento y, sin embargo, se pretende hacer pagar al ciudadano la factura por todo lo mal hecho”.
En este sentido, esta asociación propone como “solución urgente” la dimisión del alcalde socialista, una nueva valoración catastral de los inmuebles y, “un ambicioso plan de reducción de gastos que frene el deterioro y empobrecimiento a que se está sometiendo en los últimos años a Chiclana”.