Cruz Roja, que presta el servicio de socorrismo acuático, salvamento marítimo y asistencia sanitaria en las playas de Chiclana, ha contabilizado a lo largo de julio 1.653 atenciones. La mayoría fueron asistencias sanitarias básicas. Los socorristas han rescatado del agua a 26 personas. El dispositivo está compuesto a diario por 30 personas, y cuenta con servicios de localización por pulseras para menores y de baño adaptado.
Cruz Roja Española, que presta el servicio de socorrismo acuático, salvamento marítimo y asistencia sanitaria en las playas de Chiclana, ha realizado a lo largo del mes de julio 1.653 atenciones. La mayoría fueron asistencias sanitarias básicas, como cortes, irritaciones, torceduras y quemaduras por el sol, entre otras afecciones; solo fue preciso el traslado a un centro hospitalario en 39 de los casos.
Además, a lo largo de este pasado mes, los socorristas han llegado a rescatar del agua a 26 personas, que recibieron igualmente atención sanitaria. Afortunadamente, no se han tenido que lamentar ningún caso de ahogamientos durante el servicio de socorrismo, entre las 11 y las 21 horas.
Además de estas cifras, el equipo de playas de Cruz Roja, según detalla en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, localizó y prestó asistencia a 84 menores de edad que se habían extraviado. Para agilizar la localización de los niños en las playas chiclaneras, mantiene un sistema de pulseras de colores, y cada color corresponde con un tramo de la playa, de manera que los socorristas pueden saber en qué zonas se encuentran los familiares de los menores, si estos se desorientan. Este servicio también se puede solicitar para personas mayores con deterioro cognitivo leve.
La playa de La Barrosa dispone igualmente de un módulo de baño adaptado, con accesos habilitados para sillas de ruedas, que también está asistido por socorristas de Cruz Roja. Estos acompañan a diario a personas con movilidad reducida a disfrutar de las bondades de la playa, y les facilitan el baño en el mar con la mayor comodidad y seguridad, por medio, de sillas de rueda adaptadas.
El dispositivo desplegado en La Barrosa y Sancti Petri desde el comienzo del mes de julio, está compuesto cada día por un total de 30 personas, entre ellas: 15 socorristas, un facultativo médico y cuatro enfermeros, cuatro patrones de embarcaciones y tres técnicos de emergencias, teleoperadores y responsables del equipo, que se reparten entre cinco torres de vigilancias, tres módulos de enfermería (botiquines) y el conocido edificio de la institución en la segunda pista de la playa, en el que se presta asistencia médica. Cruz Roja Española cuenta además con cuatro embarcaciones tipo zodiac, dos ambulancias (una de ellas UVI móvil) y tres vehículos de apoyo y rescate. Todos los botiquines y vehículos cuentan con desfibriladores semiautomáticos, y con personal formado para su uso, lo que garantiza una atención de emergencia eficaz y de la mayor calidad.
La intervención de Cruz Roja en las playas incluye además la puesta en marcha de distintas iniciativas de carácter preventivo, con el fin de evitar los accidentes propios de este periodo estival, como las insolaciones, quemaduras solares, golpes de calor, cortes de digestión o lesiones producidas por animales marinos.
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