CARTA AL DIRECTOR enviada por: Martín Martínez Martínez, de Barcelona
Hay pocas edificaciones sin grietas, y pocas personas sin vicios. Si la grieta no atraviesa los pilares, podemos esperar. Si el vicio no perjudica la vida familiar, ni la laboral, la revisión no es urgente. Debemos preocuparnos cuando la grieta crece, o cuando el vicio que era una simple “válvula de escape”, pasa a ser un círculo vicioso. Un ejemplo que conozco bien: una persona ocasionalmente disruptiva, muchos se alejan de él, el aislamiento empeora su actitud disruptiva. Ha llegado a constituir un problema, para su entorno.
Y siguiendo con los círculos viciosos. El otro día un experto en historia, me explicaba, que con Trump, queriendo reducir la dependencia industrial y la deuda, el país puede verse atrapado, al menos, en dos: el círculo vicioso del proteccionismo y la falta de competitividad. Y el círculo vicioso de la deuda y la reducción del gasto.
Parece que del primer círculo, en el pasado hay ejemplos: la competitividad se reduce mucho y los productos importados se prefieren a pesar de los aranceles. Parece que del segundo círculo también podemos decir lo mismo: la economía se deteriora mucho, y la recaudación se reduce, y por tanto también se reduce la capacidad para pagar. DIARIO Bahía de Cádiz