CARTA AL DIRECTOR enviada por: Venancio Rodríguez Sanz, de Zaragoza
Nuestra mente es tan poderosa que nos permite influir sobre nuestro estado físico. Un estado de bienestar mental se asocia con un estado físico mejor. Dicho de manera contraria, somos más proclives a contraer enfermedades cuando nuestra mente está desequilibrada. Todos estos síntomas aparecen porque desde nuestra mente estamos poniendo a nuestro cuerpo en marcha. Nuestra mente es como un ordenador y nuestro sistema inmunológico el antivirus. No olvidemos que detrás de nuestras ideas y pensamientos hay un correlato químico en nuestro sistema biológico: la ira, la envidia, la duda, la insatisfacción, el desapego, el desamor, la agresividad, la trampa, la depresión, la crítica, la grosería; son problemas de carácter que van haciendo mella en cualquier parte del organismo.
Todos tenemos etapas de la vida que no son especialmente alegres y motivadoras. Uno de los primeros aspectos que se ven afectados suele ser la dieta. Intentamos obtener mediante el gusto el placer que parecemos haber perdido por otros aspectos de la vida. Recuerda que los pensamientos negativos envenenan tu cuerpo. Dicen que la vida es una mentira. Y tienen razón; aunque lo que tenemos es real: guerras, enfermedades, violencia, egoísmo, etcétera. Todo esto procede de un error, de una mala interpretación, de un mal hábito… En fin, de una mentira… DIARIO Bahía de Cádiz