CARTA AL DIRECTOR enviada por: Sergio de Fuente Garrido, de Alcorcón
Hace tan solo unas semanas, conocí a través de la prensa la abrumadora noticia de que el Partido Popular tiene en mente realizar nuevas reformas educativas para iniciar el nuevo curso de Bachillerato 2017/2018. Entre estas austeras reformas se encuentra la eliminación de la Literatura Española, así como la asignatura de Literatura Universal.
Muchos alumnos/as, conocedores de esta noticia respiran aliviados por esta reforma; ya que al menos al año que viene no tendrán que aprenderse como un papagayo ocho temas de literatura, y los nombres de todos los literatos que componen cada generación. Sin embargo, para todas aquellas personas amantes de la lengua y la literatura; este hecho es un agravio no solo hacia la cultura española, sino también hacia nuestra historia.
Me resulta curioso ver como las personas de talante conservador que gobiernan este país, que se jactan de ser patriotas y defensores de la cultura y la tradición española; lleven a cabo estas asoladoras y austeras reformas. Parece ser que para estos señores el término “patriota” solo se limita a lucir una pulsera con la bandera de España, ¡eso no es así! Como bien dijo el señor José Pedro Cruz Sanz, orador de la Falange Española de las JONS; ser patriota y amar a España, es proteger nuestra historia, nuestra cultura, nuestras costumbres, nuestros derechos y nuestra libertad; así como mantener encendida la figura y el nombre de todas aquellas personas que pasaron a la historia y cambiaron el rumbo de nuestro país, haciendo que seamos lo que somos hoy; ya sea para bien o para mal, pero siempre desde un espíritu crítico.
Puede que para muchas personas la literatura sea una asignatura o una disciplina inservible, que solo sirve para perder el tiempo. Se equivocan quienes lo dicen; pues esta, al igual que la paleontología permite conocer mediante estratos la historia de España; yendo desde los remotos tiempos romanos con autores hispanorromanos como Marco Anneo Lucano, hasta nuestros días con grandes autores como Miguel Delibes o Almudena Grandes, entre muchos otros.
Dada la situación, una vez más, asistimos a otra de las muchas reformas que han contribuido a la decadencia de nuestro sistema educativo, así como al aniquilamiento del patrimonio histórico y cultural de nuestro país. Es por ello por lo que nunca dejaré de preguntarme ¿hasta dónde van a llegar las enmiendas de estos señores?, ¿qué pretenden conseguir con ello? DIARIO Bahía de Cádiz