CARTA AL DIRECTOR enviada por: Pedro José Narváez Benítez, de Cádiz
¿Por qué sigue siendo nuestro país un terreno abonado a la corrupción? Porque existe poderosos intereses económicos que permiten que dichos políticos sigan en el poder, grandes empresas que se benefician de sus políticas, empresarios sin escrúpulos y ciudadanos que no somos capaces de defender lo nuestro, si ellos supiesen que solo les votaremos si limpian sus listas e impulsan medidas contundentes contra la corrupción, podríamos forzarles a combatir esta plaga y sus desastrosos efectos sobre la vida pública, la economía y el medio ambiente.
Hasta ahora, se han aprovechados del bipartidismo, estaban seguro de nuestros votos porque a no votar a uno de ellos estábamos potenciando al otro.
La dificultad para recuperar el dinero robado por las tramas de corrupción es de todo conocido y ha llevado a muchas familias a la ruina económica.
La limitación de medios a disposición de las fuerzas de seguridad, de los tribunales y de las autoridades anticorrupción, fruto de las políticas de los dos grandes partidos unida a la creación de nuevos instrumentos opacos para ocultar las ganancias ilícitas al calor de la globalización económica han hecho hasta ahora muy difícil recuperar el dinero robado.
Las investigaciones acaban diluyéndose, y los tribunales poco pueden hacer ante un condenado insolvente, tomemos como ejemplo, al cabecilla de la trama Gürtel, Francisco Correa, cuya única propiedad es una motocicleta.
Podemos discurrir las leyes anticorrupción que queramos, que luego los diputados vendidos las vaciarán de contenido en el parlamento.
Por eso toda la campaña actual de lucha contra la corrupción no deja de ser mera propaganda, palabrería hueca.
Todo será en vano, mientras el verdadero poder no resida en el pueblo y por eso os animo a todos/as que ganemos nuestro futuro, apostando por otras formas de hacer y estar en política, apoyando a aquellos que den participación, voz y capacidad de decisión a los ciudadanos y condenen a todos los sinvergüenzas que han desangrado a una nación rica como la nuestra, unos con sus actuaciones y otros con sus interesados silencios. DIARIO Bahía de Cádiz