CARTA AL DIRECTOR enviada por: Horacio Torvisco, de Alcobendas
Esta afirmación es cada vez más usada en un afán de encontrar certezas en esta realidad en continua mutación. Probablemente el mérito intelectual actualmente esté más próximo, no en buscar compulsivamente certezas cada vez más inalcanzables, sino en saber gestionar con inteligencia las incertidumbres que nos rodean buscando argumentos y acuerdos razonables entre todos, dándole a la discrepancia un valor pedagógico positivo que permita mejorar nuestro conocimiento de la realidad y no como un arma arrojadiza, que es como se utiliza en demasiadas ocasiones. ¿Por qué conformarse con la victoria si se puede llegar a un acuerdo?
El dicho ‘dato mata relato’ arranca de un error de apreciación no sólo semántico sino, sobre todo, de experiencia de vida.
Cuando se contrapone de forma dicotómica la “objetividad” del dato frente a la “subjetividad” del relato, no siempre pero sí en muchos casos, se ignora algo que es mucho más enriquecedor y creativo: objetividad y subjetividad, en la mayoría de los casos son, sobre todo, conceptos complementarios, no dicotómicos, si de verdad se quiere comprender la realidad que nos está tocando vivir.
Un relato solo se sostiene con datos veraces, asimismo, los datos alcanzan su máxima expresión y credibilidad si son explicados, de forma honesta, en el contexto en que surgen en esta compleja realidad que nos interpela constantemente. DIARIO Bahía de Cádiz