CARTA AL DIRECTOR enviada por: Luis Cabaneiro Santomé, de Lugo
Los últimos disturbios callejeros duelen más si cabe por su inmoralidad que por su violencia al aprovecharse del bajo ánimo social y de la necesidad del ciudadano para incitarlo con las proclamas adecuadas a participar en ellos y así utilizar la concurrida revuelta para defender con pasión su causa, entrar en las tiendas a robar y rematar definitivamente al comerciante; aunque igual de inaceptables, por no ser la forma la coacción ni el momento una pandemia, sería más preocupante su dimensión social si los manifestantes fueran hosteleros o gente en apuros, avalados en su protesta por el argumento de las restricciones o la necesidad.
De una manera u otra dependemos de la llegada de una vacuna eficaz que protegiendo nuestra salud garantice nuestra economía y con ella la paz social; sería la mejor carambola que el destino nos podría ofrecer en estos momentos en que tenemos que hilar muy fino hasta que llegue esa solución. DIARIO Bahía de Cádiz