“Mi vecino José Mari se marcha contento, aunque Cádiz le dé un cajonazo”

DÍA 11 (11ª CLASIFICATORIA)

Que el gobierno socialcomunista bolivariano te sube el salario mínimo ¡¡otros 80 leuros!! Hay que celebrarlo. Corre, coge la mantita, vete al sofá y sintoniza el OndaCádi que empieza la undécima noche de preliminares del Concurso Oficial de Agrupaciones Carnavalescas de Cádiz (el COAC 2023). Nada de Benidorm Fest, ehh, que no se entere Juan que me cambias de canal.

Una sesión de martes con nada desagradable y cositas notables, como las chirigotas ‘Los viñanos’ de Manolín Santander, y ‘Fariña de mis ojos’ desde Santoña; y las comparsas ‘Los peliculeros’ del Jona y ‘La guasona’, de las niñas de Rota.

No Juan, no has sido el viajero número medio millón en subirse al tranvía de San Fernando. Ese honor lo ha tenido Arteaga (el mismísimo Arteaga que coincidiera con Kiko y Quevedo), y es verídico. Aprovecha para darle la bienvenida a Jorge Meré, Sergi Guardiola y Chris Ramos, los últimos fichajes top ten de Manolo Vizcaíno. Mañana están pidiendo ya cuelo en el Falla, verá. Maripili, tira de la palanca y que este cronicón perjudicao haga mutis por el foro. Y quien quiera pagar la convía, que no se haga el remolón.

‘La burbuja’, de jabón

Las 20.37 horas. Arriba telón. Happy and crazy saluda el coro mixto de San Fernando ‘La burbuja’…, “vente a mi burbuja para ser feliz… en esta burbuja encontré una salida, de risa, de baile, de canción, y no hace falta más ná, que pa soñar de nuevo hay que volver a cantar…”. Con espíritu vitalista. Victoriano Cano suscribe la letra, y la música la comparten Luis Alfonso Betanzos y Sergio Guillén ‘el Tomate’. Saca la regadera, Juan. Un primer metatango un tanto estándar, bautizao con agüita salá…, “silencio, se escucha el tango, aunque muchos lo quieran enterrar…”. El carnaval ya no es lo que era con tanta mujer cantando, tocando, creando, plantea el segundo tango, para sacar los colores a tanto machista que “no se ha dado cuenta que las cosas cambian para enriquecer…”. Potable. El Messi y ecologistas activistas contra “los motores de combustión” aparecen en los cuplés, compartiendo protagonismo con Julio Pardo y Antoñito Martín, de aquella manera. “Vente pa mi burbuja que estamos en carnaval, que estamos en carnaval”. Y un popurrí buenrollista y utópico, y reiterativo, que se deja escuchar…, “canta y vendrá la primavera… vive la vida como si fuera el último día…”. Las influencias del Tomate son más que notorias. Juan asiente, aunque la ensalada la prefiere sólo con atún.

‘Los viñanos’, malotes del barrio

“Le hemos puesto a Iván Alejo los dos pies al revés”. Malos malos, malísimos, que “si yo soy malo, la culpa es de Cái, que me tiene malo, malito del tó”. La carta de presentación de la chirigota de Manolín Santander, hijo, number one en 2022. Se mantiene la misma línea de años atrás en ese atrezzo molón, con su luna lunera al fondo. En la autoría, el trío José Manuel Sánchez Reyes, Carlos Pérez Pérez y Manuel Santander Grosso. Con potencia responde el primer pasodoble a los que derrotan a la chirigota por repetirse año tras año…, “aunque somos malos malos, a mi gente y mi Tacita no las pienso traicionar… otra vez atrapado en un carnaval, del que nunca me escaparé… que le hago si mi chirigota, ha nacío en el barrio la Viña”. Y original manera de despedir ar Kichi en la otra letrilla, valorando su mandato de ocho años como si fuera una agrupación carnavalesca que pisa el Falla…, “ya se marcha mi vecino José Mari, como alcalde vive su último febrero, ya descansa quienes lo han odiado en Cádiz, sólo por ser carnavalero… se acabó un repertorio que apuntaba pelotazo… mi vecino se marcha contento, aunque Cádi le dé un cajonazo”. A los cuplés: a la monotonía del matrimonio, hasta que entra la suegra en casa; y a la rivalidad entre Jeré y Cádi por aquello de si se dice zambombá o zamboba…, “yo me toco la zambomba y la zambobá es lo que llega al techo”, jajaja. “Pero cuando veo sangre, yo me desmayo yo me desmayo”. Las maldades cargantes se reproducen en ese popurrí marca de la casa, cuando los sándwich mixtos empezaron a hacérselos con la primera y última rebaná, se volvieron viñanos…, “Procopio, picha, este año vas a la final”, jeje, y todo desemboca, como no, en la orillita de la Caleta, “la malaje se nos va quitando cuando a Cádi llega el carnavá…”. Juan, no seas malo.

‘La guasona’, martillo pilón

“Tú ríete de ellos, que ellos no se reirán de ti ahoraaa”. Aparece en escena la comparsa de Rota ‘La guasona’, liderada por Alba María Fernández Neva, El reír con sorna por no llorar entre tanto ruinaso sobrevuela el ambiente. Cádi sin ná, explota por carnavá. “Desde que era una niña ya me sentí diferente…”, comienza el primer pasodoble, indagando en el “amor puro entre dos mujeres”, entre ellas y las cositas de Cádi. Y buscando a dios, “de todas las religiones elijo la libertad…”, sentencia la otra letrilla, bien llevada. Con reminiscencias juancarlistas, ¿quizá? Telecinco y su isla de las tentaciones divulgativa; y “un cuplé de pelo sin ser machista”, jeje, en la tandita, rematada por “mi madre, mi matria, mi casa, que tú has sido mi maestra, no te lo tomes a guasa”. Estribillo que da paso a un consistente y sustancioso popurrí más peleón y crítico que payaso, e interpretado de gran categoría…, “y hay que salir a luchar, hay que seguir cantado, tirititrán, que nos están avasallando… hay que luchar, hay que insistir… te toca a ti”. Juan me acaba de chivar que el tipo se inspira en ‘Joker’, peli conocida en Hispanoamérica como ‘Guasón’. Ahí le has dao, Wiki Wiki.

‘La patrulla canina’, top guan

A volar, pa pa páaaa. Aterriza en la plaza Fragela ‘La patrulla canina’, chirigota murciana con base en Beniaján. Entrenados para misiones en bodas, bautizos y comuniones. Francisco Javier Sánchez Sánchez y David Márquez Mateos, Carapapa, comparten la autoría. Pasodoble acrobático, con sus piruetas “para decirte cuánto tesquieeeeroooo…, tú eres irresistible, te lo dice este murciano, nosotros unos jartibles…”. Íiiiiiiiin… E instando a apoyar a los sanitarios en su lucha por la pública que “nos vienen avisando de que nuestra sanidad se está yendo a la mierda… pa la clase obrera no hay otra salida… en sus manos están nuestras vidas”. Un cupletillo real y otro fetichista. Ajín ajín. “Dice Pedro Sánchez que ya estamos mejorando… pero el sueldo se nos va, volando, volando”. Estos pilotos se menean al son del baile de la ensalada, ejem, en un pupurrí que planea. Vaya, plano plano. Trabajado pero sin chicha ni limoná. Juan se ha quedado esperando un cameo de Chase, Marshall, Skye, Rocky o Zuma. Ni un ladrido. Guau guau.

‘Los peliculeros’, ¡claqueta!

Saca el cubo de palomitas, Juan. “Pe-li-cu-le-ro, por hacer de mi vida justo lo que quiero, por pintar de colores lo que tú ves negro, por pretender que estás cositas que te canto en carnaval se vuelvan tuyas…”. Comienza ‘Los peliculeros’, esta “colorida, independiente, musical y guerrillera” comparsita del Jona, Jonathan Pérez Ginel, cumpliendo quince Fallas. El “guion omnipresente de la vida del coplero” desarrolla un primer pasodoble holaquéhay…, “mi cine es independiente de directores laureados, es fino, golfo y sencillo, como la mare que lo parió… sólo depende de ti, lleva el compas de las olas del mar…yo no ansío la fama de un dios ni una estrella en tu suelo, yo con verte junto a estos doy por cumplido otro febrero”. Potito. Y la muerte y sus variantes se expone en una segunda letra que llama a vivir…, “que al marcharnos nadie nos diga, ahí va otro idiota que ha muerto en vida”. Cuplés palomiteros, con toquesito al Carapapa y un sobre bomba, de chocolate, llega al Yuntamiento; “tú me tachas de peliculero, yo por ti me salgo del guion…”, afirma un estribillo supercalifragilisticoespialidoso. “En Cádiz siempre se vivió de película…”, subraya un elaborado popurrí con el séptimo arte como metáfora, como la vida misma…, “siempre habrá directores que arriba del pueblo manejen los hilos de sus sentimientos… Qué difícil es creer, es pensar, viviendo entre tomas falsas en esta farsa de sociedad… Yo no busco un amor edulcorado y de sus mitos prisioneros, prefiero el tuyo con sus defectos, que es más bonito y verdadero… Cuídate de aquellos que te dirijan,…”. Juan, no sé si se llevarán un Oscar o un Goya, pero lo que rima no, omeeee.

‘Fariña de mis ojos’, ese talquiño

Como una olla. Perdón. “Llega a esta terra o barquiño, mais típico no lo hay, desde la ría do Arousa, hasta la costa de Cádiz… sin miedo a meter la pata, te juro por el dios Momo, Cádi, Tacita de Plata, o plomo… ahí va Julio fardoooo”. Repartiendo fariña y billetes de quinién al foso se presenta la chirigota de Santoña ‘Fariña de mis ojos’, con acento cántabro-galego. Eder Rey Prada firma la letra y José María Barranco, el Lacio, la música. Un viajesito desde tierras gallegas a la Caleta de entrada para descargar la mercancía, “que droga traemos poca, sólo somos tus amantes, somos narcotraficantes, de coplas, de coooplas”. Y en el segundo pasodoble, complejo, no saben cómo pagarle al Lacio la música, “la magia del coplero de la Viña, que hace que suene, más a Cádiz mi Fariña”. Y con un “di no a las drogas, no a las drogas ni a los coros”, jajaja, anticipan la tandita de cuplés, con Quiñones protagonizando uno de ellos, disfrutando de chófer en el entierro de Isabel II. Y estribillón: “Yo sé lo difícil que es venir del norte al sur pa conquistarte vendiéndote mis pamplinas, por eso la Teo siempre ha sido mi heroína”, jajaja. Y popurrinazo con momentos irreverentes y con su carguita, golpes entipados y empolvados, aunque eso de “la Cruzcampo es como Susana Díaz, sólo os gusta en Andalucía”, es para negociarlo, chavales. “Qué bonito es ser de Cádi, pero no te envidio hermano, que más bonito es ser de fuera y sentirse gaditano”, de colofón, y el teatro revoleao. Qué gusta una anchoa en condiciones en el Falla. Juan no para quieto con el ¡¡la que estáis fumando, chiquiño!! Ratazo. Mercancía de importación de la buena.

‘La isleta del tesoro’, bandera azul

Y poniéndole el lacito a la función, Nono Galán y su comparsita local ‘La isleta del tesoro’. ¿Son piratas, Juan? Son piratas…, con Fernando Quiñones en el estandarte. A conquistar el tesoro de la Caleta, la playa viñera. Piropillo al canto en el primer pasodoble, guiando a un ciego a través del resto de sentidos por un Cádi arcoíris…, “mira cómo es mi ciudad, que con sólo pasear, ya te saca los colores”. Y la educación desde casa es la clave, en el otro pasodoble no-es-no, para acabar con los abusos y acosos, parece contar la otra letrilla. El Lacio y los polvorones de los niños de Messi, adobando los cuplés comparsiles… “Tú no me digas pirata, yo prefiero que me digas caletero… me enamoré en la Caleta de la niña que más quiero”. ¡¡Capitán!! Delicioso piropo de ocho minutos para acabar, con una llamativa cuarteta reivindicando que devuelvan la bandera azul a la Caleta…, “Cádiz la cruz de mi mapa, te busco y me pierdo, Cádiz mi punto y final… ya lo tenía delante y mi tesoro encontré… Cádi mi Cáaaadi”.

La 01.13 horas. Baja el telón. Juan, vamos a seguir barriendo palomitas del Jona, mientras asumimos que ya está aquí ¡¡febrero!! Y caminito a la cama pídele a Alexa que nos cante una nana nanita éa: “Me han dicho que la locura es una enfermedad, tan típica de Cádiz que los gaditanos, que no la padecen nunca van al cielo… pero si se vuelven loco, tampoco se van, porque juntito al mar, se quedan para siempre, cantando las coplas de la tierra mía…”. DIARIO Bahía de Cádiz Dany Rodway

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