PASE DE SEMIFINAL
Con eco eco, y eso que no hay descansos, ¿no?, amanece ‘El diablo se viste de coro’, con piano a cuestas. “Por enamorarme, yo por ti me transformé… y por fin y por fin el diablo está aquí, mi doctrina está aquí, yo también sé andar sobre el mar… el diablo también sabe amar”. Amar, amar, hablar no, sordera. Quejoso con el Estado español que no está quedando… “A España la han convertido en paraíso de sinvergüenzas, un país que paga cuatro reyes y a todos sus descendientes que escondidos siempre están… un país donde la educación es una falsa moneda, un país donde el que paga soy yo, un presidente que es ciego, la oposición que está sorda, sindicatos mudos, y que le den porculo al pueblo español”. Y batallitas del abuelo sobre este teatro… “guarden por siempre un respeto, que el carnaval es cultura y aquí está la cuna de la libertad” ¿Qué dice, joe? Demasiadas calles de santos en Cádi, les producen escalofrío… “me di una vuelta por Puertatierra y me topé con la calle Cielo”, en un cuplé. Herodes, el Jocker, Judas, Carrie, Franco, Malasombra, el Coyote, Torquemada, Drácula, Mussolini, la momia… son crueles y perversos de verdad, con tanto golfo, canalla y malo, la culpa siempre es para el diablo. Da la sensación de que el popu va musicalmente por delante de lo demás… “vamo a vé, cómo explico cómo es el infierno, que te esperamos si al cielo no llegas… me quedo en Cádi, que no me vuelvo a ir para el infierno, porque el paraíso eres tú”. Platillaso platillaso platillaso, dame platillo, primo. Enga, a mojarse: el tontito de las banderitas no quiere ser malage, pero…; el señor mongolo (de Mongolia) es muy de cuernos y rabos, pero… Campana y se acabó.
(extracto de la crónica diaria de la 3ª semifinal del COAC 2018, AQUÍ)
PASE DE CUARTOS DE FINAL
Peshá de cuernos en el Falla, iluminatis, en el reinicio de la función, cornudos y con orgullo, con Inés estrenándose con el coro de su pare Nadi Migueles. Te cantan los niños, hoy, la presentación casi al oído, cerquita cerquita del proscenio. Dale al piano. Del cielo, al infierno… “que por fin, que por fin, el diablo está aquí, a enseñar cómo amar, que el diablo también sabe hablar… mi doctrina está aquí, ven a mí, que también sé andar sobre el mar, que el diablo llegó a tu ciudad”. Rebuscando en los cajones de la cabesita loca, miedos y temores, en el primer tanguito… “miedo a fregar sólo un plato, a que sea sólo un gato el que duerme conmigo… pero nunca miedo me da a denunciar sobre estas tablas… van a tener que cortarnos la lengua y las manos en mi carnaval”. Y subrayando a la orquesta del grupo, todas mujeres para interpretar el otro tango muy musical… “la música es para el alma como el agua para el sediento, es linda y la palabra que sin hablar te pide perdón, hermana a las razas y al prisionero le da valor…para bailar toda la noche, para ocultar tu mal humor… es un placer, nueve mujeres en mi orquesta…”. ¿Cómo contactar con estos diablos?, con una aplicación de móvil… “si la descargas esta semana, te damos catorce gigas, un par de cuernos y tarifa plana”, en un cuplé; en el otro, en el concurso “mucha gente de Sevilla, eso a mí me maravilla… pero prefiero seguir viviendo en el infierno que es más fresquito”. El tontito de las banderitas se ha perdido por el tercer malote del estribillo, ¿podéis ir más deeeeespacito?… con tanto golfo, canalla y malo, la culpa es siempre para el diablo. El popurrí, sonando, como en el global, más clarito que en preliminares, te sigue encontrando diablos por donde menos te lo esperas, y donde es evidente, con enorme puyita metaconcursera intercalada, que dice, vaya si dice… “que te esperamos si al cielo no llegas”. Señor mongolo (de Mongolia), eso va por ti.
(extracto de la crónica diaria de la 5ª cuartos de final del COAC 2018, AQUÍ)
PASE DE PRELIMINARES
Arriba esos niños. Arriba ese piano, primo, afú. Celestial entrada del coro ‘El diablo se viste de coro’, que a mitad de presentación baja del cielo al infierno… “el diablo también sabe hablar, el diablo llegó a tu ciudad”. Lástima que parte de las voces, al menos desde el foso de los leones, quedan tapadas por el órgano y la guitarra acústica. El coro de los niños, el coro de Nandi Migueles regresa sin medir la potencia y con cuernos, tras el parón del pasado concurso. Metatango de re-presentación y puesta en situación el primero, “será que se me acabó la fuerza para escribirte de corazón, son ya treinta tangos por febrero que para un niño no está mal… y qué voy a hacer si a mí el tango me metieron por la sangre mis abuelos, si a ti te lleva al cielo a mí me lleva al infierno… tango que nace del pueblo, que nace del fuego…”. Y el segundo, Nandi se lo dedica a la mujer soñada y que le apoya allá donde esté. Sin duda, la que fue su pareja está detrás de la emotiva letrilla. Con tantos golfos, canallas y malos, la culpa es siempre para el diablo, acierta a decir un kilométrico estribillo que repasa a una treintena de malvados de ayer y hoy. “Po a ver si algún año descansa el Nandi de un estribillo con trabalenguas”, reclama el grupo en el segundo cuplé. El popu sospecha la presencia de demonios y diablos en la vida rutinaria; en el carnavá… “eres ese carnavalero que me da coraje”; entre la clase política… “enriquecerse es su meta, trincar, por mucho que te prometa”; y entre ciertas mujeres… “que hasta el video de la boda se lo quedarán”. “A ver cómo explico cómo es el infierno, que te esperamos si al cielo no llegas…”, va concluyendo antes de los platillasos ensordecedores y los fuegos artificiales virtuales. Excesivamente solemne. El tontito de las banderitas y el señor mongolo (de Mongolia) continúan en el limbo a estas horas. DIARIO Bahía de Cádiz
(extracto de la crónica diaria de la 15ª clasificatoria del COAC 2018, AQUÍ)
FICHA DE LA AGRUPACIÓN
Coro: ‘El diablo se viste de coro’
Localidad: Cádiz
Autoría Letra: Fernando Migueles Santander
Autoría Música: Fernando Migueles Santander
Dirección: Juan Lázaro Arroyo
Representante legal: Fernando Migueles Santander