La Zona Franca de Cádiz ha dado un paso más en la tramitación urbanística necesaria para hacer realidad el ambicioso proyecto de Navalips: una nueva zona urbana “inclusiva, social y sostenible” en el polígono exterior, con más de 800 nuevas viviendas (el 50% protegida), 10.000 metros cuadrados de zonas verdes y 28.000 m2 de zonas comerciales.
La actuación, en el suelo de la antigua Navalips, la promueven el propio Consorcio y Sepides, empresa pública perteneciente a la SEPI y dependiente del Ministerio de Hacienda (al ser propietaria de parte de este terreno desde hace años baldío).
Así, acaba de presentar en el registro del Ayuntamiento gaditano el avance del Plan Especial de Reforma Interior (PERI) del ARI-ZF-01 (redactado por la empresa Eddea Arquitectura y Urbanismo) y el documento Ambiental Estratégico Simplificado, que se someterá ahora a informe sectorial ante la Junta de Andalucía.
En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, el delegado del Estado de la Zona Franca de Cádiz, Fran González, remarca que “este nuevo paso ratifica que estamos cumpliendo con el calendario previsto para que el proyecto sea una realidad en el menor plazo de tiempo posible, desde el compromiso y la apuesta por la transformación del polígono exterior como una nueva zona urbana con usos mixtos en la que van a convivir un nuevo modelo industrial más sostenible, con usos comerciales, residencial, equipamientos y zonas verdes”.
“Estamos avanzando en la tramitación y las gestiones urbanísticas en colaboración con el Ayuntamiento, con el que se mantiene un diálogo fluido y un clima de entendimiento en favor de la revitalización de esta estratégica zona de la ciudad que supone una oportunidad única en materia de vivienda, lo que va a redundar en la mejora del bienestar de los gaditanos”, reitera este político del PSOE.
EL PROYECTO SE AÑADE A DAR EL “IMPULSO DEFINITIVO” A LA REORDENACIÓN DEL POLÍGONO EXTERIOR
De este modo, una vez presentado el avance del PERI e informado favorablemente el documento ambiental, se presentará el PERI para su aprobación inicial y se someterá a exposición pública previo a su aprobación definitiva, una fase estimada en 18 meses, “lo que nos situaría en los primeros meses de 2025”. Con ello, se estarían cumpliendo los plazos previstos en el calendario marcado por el Consorcio, que calcula que a lo largo de ese 2025 se podría licitar el proyecto de urbanización e iniciarse la primera fase de la construcción de las viviendas.
La Zona Franca de Cádiz, con la colaboración del Ayuntamiento y “un modelo de inversión público-privada”, quiere que este proyecto de Navalips y el ya avanzado de Zona Base-Incubazul en la antigua Ibérica Aga, “supongan el impulso definitivo a la reordenación del polígono exterior”, una “oportunidad” para la ciudad, para atraer inversiones, para generar empleo y generar soluciones a la vivienda, “conformando una zona con usos mixtos en la que van a convivir un nuevo modelo industrial más sostenible, con usos comerciales, residencial, equipamientos y zonas verdes”.
LA DIVISIÓN EN UNIDADES DE EJECUCIÓN PERMITE EL DESARROLLO DE MANERA INDEPENDIENTE Y POR FASES
Tras meses de trabajo, la Zona Franca y Sepides concluyeron que el PERI es el instrumento contemplado en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que va a permitir acelerar los plazos para desarrollar este espacio en el polígono exterior. Del ámbito total de actuación de 80.989 m2 (ARI-ZF-01) se han delimitado cuatro unidades de ejecución: la UE-ZF-01 Núñez de Balboa, 20.995 m2; la UE-ZF-02 Manuel de la Pinta, con 33.016 m2; la UE-ZF-03 Vejer Norte, con 5.934 m2; y UE-ZF-05 Jimena, con 21.044 m2.
El proyecto apuesta, por tanto, por un modelo de gestión “realista” y que “haga viable su ejecución” y por ello la división en unidades de ejecución permite el desarrollo de manera independiente y por fases, lo que está posibilitando dar mayor agilidad a la tramitación urbanística y al desarrollo de los trabajos. Será en la UE ZF-2, en la que la Zona Franca y Hacienda son propietarios mayoritarios, donde se confía en iniciar en su momento la primera fase del proyecto.
En paralelo también se trabaja informando del avance de los trabajos a los propietarios incluidos en este ámbito de ejecución, en aras de dar la mayor transparencia a todo el procedimiento y mantener un diálogo fluido con todos los implicados.