La bandera del orgullo trans ondea este lunes día 23 en la fachada del Ayuntamiento de Cádiz, en el cuarto mástil adicional, con motivo de la conmemoración del Día Internacional por la Despatologización Trans. Este izado se hace en cumplimiento al acuerdo adoptado por unanimidad en el pasado pleno de marzo relativo a la celebración del Día Internacional de la Visibilidad Trans.
Al respecto, la concejala de Mujer, Ana Camelo, ha señalado que si bien “ha habido algunos avances” como que la Organización Mundial de la Salud (OMS) y a la American Psychological Association (APA) “hayan dejado de considerar la identidad trans como una patología y por tanto sacarla del grupo de enfermedades mentales, existe todavía un largo camino que recorrer ya que las definiciones que ambos organismos hacen de la transexualidad perpetúan esta identidad como un estado inferior y no como una condición humana que se deriva de la inmensa expresión de la diversidad”.
En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, Camelo recuerda que Andalucía ha sido pionera en todo el Estado español al haber aprobado la Ley integral para la no discriminación por motivos de identidad de género y reconocimiento de los derechos de las personas transexuales que se fundamenta en ambos principios: “aún así, tenemos que seguir trabajando por la lucha contra las desigualdades y esta lucha pasa por visibilizar a este colectivo con acciones como el izado de la bandera”.
Esta edil de Por Cádiz sí se puede apostilla que el pasado año se realizaron más de 120 acciones dentro de la campaña internacional Stop Trans Pathologization (STP) en 47 ciudades de diferentes regiones del mundo, y a las que el Ayuntamiento gaditano se ha sumado.
Desde el año 2009, STP lanza la convocatoria de este Día Internacional de Acción por la Despatologización Trans, con actividades por todo el mundo a lo largo del mes de octubre. Los objetivos principales que se persiguen son: la retirada de la clasificación de los procesos de tránsito entre los géneros como trastorno mental de los manuales diagnósticos, el acceso a una atención sanitaria trans-específica públicamente cubierta, el cambio del modelo de atención sanitaria trans-específica desde un modelo de evaluación hacia un enfoque de consentimiento informado, el reconocimiento legal de género sin requisitos médicos, la depatologización de la diversidad de género en la infancia, así como la protección contra la transfobia.
Más allá de esta campaña, lo curioso del izado de esta bandera en el Consistorio gaditano es que ni Subdelegación del Gobierno ni el PP han corrido a los juzgados para denunciar este acto, como si hicieron en 2016 cuando se mostró en este cuarto mástil, por el emblemático 14 de abril, la bandera republicana. Hace unas semanas el Contencioso Administrativo dictaba sentencia sobre ese controvertido recurso, un fallo que dice que en edificios públicos no puede colocarse otra bandera que “no sea la oficial o la propia del municipio”. O sea, tampoco estaría permitido este símbolo del movimiento trans. Pero algunos se ve que miran para otro lado cuando no les interesa políticamente.