El primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Cádiz y concejal de Urbanismo, Martín Vila, acudía hace unos días a Madrid, a una reunión con la Dirección General de Infraestructuras del Ministerio del Interior, para consensuar el protocolo de cesión de espacios en la ciudad que tiene como objetivo la construcción de una nueva Comisaría de la Policía Nacional en la avenida de Astilleros. Ello mientras los agentes prestan servicio desde hace meses en unas dependencias de alquiler (en el edificio del Pirulí de Telefónica) y se sigue rehabilitando la problemática antigua Comisaría en la avenida, aunque la idea es que no vuelva a tener dicho uso.
La intención es llevar a cabo una permuta de espacios en la avenida de Astilleros, en el terreno terciario que se ubica junto a la estación de Renfe (terrenos que Adif no logra vender y que cedería al Consistorio, como compensación por no ejecutar la reurbanización de la carretera industrial comprometida), a cambio de dos inmuebles: el edificio actual de la Comisaría, mucho más atractivo para el sector inmobiliario, y los despachos donde se tramita el DNI.
De esta forma, el Ayuntamiento de Cádiz pone a disposición de Interior el espacio para facilitar que la ciudad tenga “una Comisaría en condiciones, digna para los trabajadores y para los usuarios”. En este punto, Vila ha lamentado la “situación precaria actual” de la Policía Nacional, que está ocupando de forma provisional el edificio del Pirulí, “con las carencias y inconvenientes que ello conlleva”; por ejemplo, el no contar con calabozos.
En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, este concejal de Ganar Cádiz en Común vuelve a incidir en la necesidad de que exista “colaboración entre administraciones en beneficio de Cádiz, pues los intereses de la ciudad están por encima de los colores políticos, y en esta línea venimos trabajando desde el primer día que llegamos al Gobierno local”.
Igualmente, resalta que esta operación es “pieza clave para avanzar en el desbloqueo de la urbanización de la avenida de Astilleros”. “Nos interesa la organización de la avenida de Astilleros y queremos gestionar esa parcela para que dé cabida a la Comisaría Provincial y a otras posibilidades en las que estamos trabajando y que permitirán a la ciudadanía tener una avenida de Astilleros urbanizada lo más pronto posible”, ha insistido el edil de Urbanismo. La administración local asumiría el coste de la obra con los fondos que trataría de obtener por la venta del edificio de la actual Comisaría.
“Llegado el caso, y para agilizar los plazos, se ha brindado la posibilidad de que el proyecto de la nueva Comisaría se pueda realizar desde la Oficina Técnica de Proyectos y aportar como colaboración municipal en dicho protocolo”, ha añadido Martín Vila.
El actual equipo de Gobierno asegura que viene trabajando en la demorada operación urbanística de Plaza Sevilla desde octubre de 2015, “con objeto de desbloquear una situación heredada en punto muerto tras casi ocho años de inacción por parte del Gobierno del PP”.
“Nos mueve la necesidad de urbanizar esta vía de conexión entre la barriada de Astilleros y el casco histórico, y es por ello que ya aprobamos el proyecto de urbanización en julio de 2017. Y en este primer semestre de 2018 haremos de forma provisional una serie de mejoras, mientras seguimos trabajando en esta operación de desbloqueo”, avanza.