El Ayuntamiento de Cádiz trabaja en el recinto de restos arqueológicos que se encuentran en los bajos del espacio Entrecatedrales (entre la Catedral Nueva y la Catedral Vieja) “para impedir la entrada de personas y que se produzcan actos vandálicos”.
Esta decisión, tomada desde la concejalía de Urbanismo, tiene su origen en una denuncia de la Policía Local del pasado 11 de mayo: al acudir los agentes pudieron comprobar que se había forzado la puerta, rompiendo el enganche del candado y que se había cerrado por dentro con un alambre.
También pudieron comprobar que el foso tenía una gran cantidad de suciedad y se encontraba en el espacio una tienda de campaña, a lo que se sumó en el atestado policial que todo el recinto se encontraba “en total estado de abandono”.
Ante esta situación, tras una visita posterior de los técnicos municipales y de la empresa adjudicataria de las obras de emergencia y ejecución subsidiaria del área de Urbanismo, se procedió a acometer algunas actuaciones de emergencia, se precisa en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz.
En primer lugar, se llevó a cabo a la retirada de basuras, ropas y enseres acumulados en el yacimiento “por personas sin hogar y ocupantes ilegales”. Asimismo, se ejecutó la reparación y colocación del nuevo sistema de cierre en la puerta acristalada que da acceso al recinto. Por último, se instaló una reja sobre el hueco de la puerta para impedir el acceso de personas no autorizadas.
PERO SIGUEN ACCEDIENDO PERSONAS “DE MANERA ILEGAL”
No obstante, semanas atrás se comprobaba en una visita rutinaria para el reconocimiento y seguimiento del estado del cierre de los accesos que, a pesar de que se ha asegurado uno de los puntos, existe otro, concretamente en la calle Santísimo Cristo del Perdón, por donde siguen accediendo personas “de manera ilegal”.
Por todo ello, desde Urbanismo se están estudiando técnicamente diversas soluciones para impedir a muy corto plazo la entrada desde esta calle al interior “ante el riesgo de vandalismo, acumulación de basura, el peligro de un mayor deterioro del yacimiento e, incluso, incendios”.
Una vez que se hagan estos trabajos, se añade, “habría que revisar de manera regular el estado de seguridad de este recinto o proceder a un servicio de vigilancia y protección para impedir que pueda haber nuevos actos vandálicos”.