Investigadores de los departamentos de Ciencias de la Tierra y Física Aplicada de la Universidad de Cádiz han realizado un estudio que establece las condiciones atmosféricas responsables de la generación de eventos meteorológicos extremos en el Golfo de Cádiz, que pueden causar inundaciones e importantes daños en el litoral. Este trabajo centrado en la vulnerabilidad de las zonas costeras, determina que el riesgo al deterioro del litoral está relacionado con el nivel del mar.
Los investigadores Theocharis Plomaritis, Javier Benavente, Laura del Río e Irene Laiz, pertenecientes los departamentos de Ciencias de la Tierra y Física Aplicada de la Universidad de Cádiz, han realizado un estudio que establece las condiciones atmosféricas responsables de la generación de eventos meteorológicos extremos en el Golfo de Cádiz, que pueden causar inundaciones e importantes daños en el litoral.
En el estudio, publicado en la revista científica ‘Climate Dynamics’, se contempla un posible aumento en la vulnerabilidad de las zonas costeras debido a las variaciones en los patrones de los temporales marítimos, junto con el incremento de la ocupación costera. Esta situación de riesgo está relacionada con el estado del nivel del mar, al cual contribuyen: la marea meteorológica, la altura de ola máxima y el alcance del oleaje sobre la costa.
Este análisis se engloba dentro de las líneas de investigación recogidas en el Campus de Excelencia Internacional del Mar (CEI.Mar), que lidera la Universidad gaditana.
Para poder entender mejor los procesos físicos que ocasionan la variabilidad de estos parámetros, se utilizó un registro de 44 años (1958-2001) de datos de reanálisis de variables meteorológicas, oleaje y nivel del mar de la serie HIPOCAS, generada en el contexto de un proyecto europeo coordinado desde el Instituto Superior Técnico de Portugal y en el que participó como socio español Puertos del Estado. Esta serie temporal fue validada con datos reales de oleaje y nivel del mar de la red de boyas de oleaje y mareógrafos de Puertos del Estado, y a partir de ella, se identificaron los patrones de la magnitud, duración, frecuencia y dirección de aproximación de las tormentas procedentes del Atlántico y que afectan al Golfo de Cádiz.
Con ello, en este estudio se caracterizaron las tormentas a partir de sus variables: altura de ola máxima, energía total de la tormenta, dirección de aproximación del oleaje y duración. Estas series temporales obtenidas se compararon con índices atmosféricos de gran escala como la Oscilación del Atlántico Norte (NAO por sus siglas en inglés) y el patrón del Atlántico Oriental (EA por sus siglas en inglés). Los resultados de este trabajo muestran una elevada correlación entre los valores negativos de la NAO y el número de temporales marítimos en el Golfo de Cádiz, así como con situaciones de elevadas mareas meteorológicas.
El hecho de que durante periodos de NAO negativas se produzca la llegada de un mayor número de temporales, aumenta considerablemente la posibilidad de que dichos eventos se produzcan durante mareas astronómicas vivas, lo que implica una situación de mayor vulnerabilidad de las zonas costeras y un incremento en el riesgo asociado. En general, se comprobó cómo para valores del índice NAO inferiores a -1 existe una elevada probabilidad de la aparición de un “evento extremo” que pueda causar inundación e importantes daños. Esta conclusión fue contrastada comparando eventos reales de inundación costera ocurridos en la provincia de Cádiz a lo largo de los últimos inviernos.
Estos resultados, según se ha trasladado a DIARIO Bahía de Cádiz, por un lado, permitirán identificar condiciones potencialmente peligrosas a partir de los valores de los índices atmosféricos de gran escala, los cuales son relativamente fáciles de pronosticar. Y por otra parte, la existencia de registros de dichos índices en series de mayor duración permitirá identificar posibles cambios en las tendencias climáticas que afectarán a la costa en las próximas décadas.