JORNADA 16. Tras el empate en Vallecas, el Cádiz, líder todopoderoso, cerraba este domingo la jornada en Segunda de nuevo a domicilio. Viajaba hasta Tenerife para enfrentarse ante un rival con dudas metido en la zona baja de la tabla, todo un peligro. En una jornada en la que se ha conocido que el primer rival copero de los amarillos será el CD Lealtad de Villaviciosa (equipo asturiano de Tercera).
El once de Cervera en el Heliodoro Rodríguez López, antigua casa del técnico cadista, fue el esperable ante las bajas de Cala y Perea: Cifuentes en portería; Iza, Pacha, Fali y Mauro, en defensa; Garrido y Jose Mari en el centro del campo, con Álex Fernández más adelantado; Salvi y Alejo en los extremos y Choco Lozano arriba.
No empezó nada bien el conjunto gaditano el encuentro: bien ‘aplatanao’ durante prácticamente la primera media hora, sin tener muy claro si el choque había comenzado ya, ante un Tenerife intenso y motivado que parecía el líder. Y aprovechando esa espesura amarilla, los blanquiazules se adelantaban pronto, en el minuto 11, con tanto de Suso ante una defensa inofensiva. Y no fue la única ocasión tinerfeña en estos minutos con los de amarillo dormidos.
Y sin hacer prácticamente nada, pasado el ecuador el Cádiz, sin ser el Cádiz atrás, daba un pasito adelante, y en el 27 el Choco avisaba en una acción puntual estrellando la pelota en el larguero, asistido por Salvi, de rubio. Y en el minuto 35, a balón parado, Pacha Espino sacaba, Garrido peinaba y la pelota la cazaba Marcos Mauro para empatar.
Más entonados y asentados entraron al verde tras el descanso los de Cervera (aunque teniendo en cuenta el mal primer tiempo, una mínima mejora…), mirando a Ortolá ante un conjunto insular más contenido y menos suelto.
No se concretaban acciones de verdadero peligro en ninguna de las dos áreas, y empezaron a moverse los banquillos. En el visitante, Jurado sustituía a Alejo y Marcos Mauro, con molestias, dejaba su sitio en la defensa al canterano Sergio González. Aunque el de Sanlúcar apenas duraba un rato, y se retiraba también lesionado: Nano Mesa lo reemplazaba.
Los dos equipos aparentemente querían la victoria, pero tampoco lo demostraban del todo. Y el empate no se movió ya. Reparto de puntos quizá insuficiente para las aspiraciones de uno y de otro, aunque las urgencias y necesidades de cada uno sean hoy día dispares. Con todo, el Cádiz continúa bien asentado en lo más alto de la clasificación con su perseguidor inmediato, el Fuenlabrada, a 8 puntos.
“Ganar aquí no hubiera sido un resultado justo”, reconocía en rueda de prensa postpartido un sincero Cervera. Nada más que añadir. DIARIO Bahía de Cádiz