El reto ‘Quantification of ocean litter using images (I-Litter)’ (Cuantificación de la basura del océano mediante imágenes), presentado por Carmen Morales de la Universidad de Cádiz, ha sido el ganador del Ocean Hackathon 2020 que se ha celebrado este fin de semana en la capital gaditana, en el recinto interior de la Zona Franca, y que ha congregado a 57 investigadores (en nueve equipos) en torno a los seis retos, de los nueve iniciales, que han competido en la final.
Este evento científico internacional se ha desarrollado por primera vez en el Estado español (además de en Cádiz, en Cartagena); reuniendo en el recinto fiscal gaditano durante 48 horas a expertos y estudiosos en el ámbito de los océanos, compitiendo por representar a Cádiz en la final que se celebrará en diciembre en Brest (Francia).
De esta forma, Cádiz y simultáneamente otras 15 ciudades marítimas del mundo se han convertido en las últimas horas, de alguna manera, en un laboratorio de ideación para los equipos participantes que han tenido que desarrollar, a través de la tecnología y diferentes variables y datos científicos, aquellas propuestas y retos de mayor interés para la protección de los océanos, teniendo como objetivo la creación de herramientas para la mejora de los océanos.
Junto con la Zona Franca de Cádiz, han colaborado de manera activa con el Ocean Hackathon 2020 la Universidad de Cádiz (también a través del CEI.Mar) y el CEEI Bahía de Cádiz. El evento, entre la tarde del viernes y el domingo, ha tratado además de cumplir las circunstancias especiales derivadas de la pandemia del coronavirus y ha reforzado todas las medidas preventivas para mantener el carácter presencial de los equipos y el contacto con los mentores/expertos. En este contexto, el Consorcio ha habilitado para su desarrollo el patio central y salas del edificio Melkart; el salón de actos y la sala de exposiciones del edificio Heracles; y la plaza central entre ambos edificios.
“INTERÉS Y CALIDAD” DE LOS INVESTIGADORES PARTICIPANTES
El equipo ganador del evento con su proyecto sobre cuantificación de la basura del océano mediante imágenes ha estado integrado por nueve personas, cinco investigadoras de forma presencial y el resto de forma telemática. Entre sus integrantes se encuentra la promotora del reto 7, Elena Ortega, que se fusionó con este equipo por compartir temática e intereses comunes.
En segundo lugar se ha situado el reto 8 presentado por Esther Puertas, también de la UCA, denominado ‘Mobile APP to promote a new blue tourism model. More inclusive amd sustainable’, una aplicación móvil para promover un nuevo modelo de turismo azul más inclusivo y sostenible.
Y el tercer premio ha ido para David Gómez-Ullate, del Departamento de Ingeniería Informática de la Universidad gaditana, que ha concurrido con el reto ‘Route optimization for vessels in the ocean’, para optimizar las rutas en navegación, con el consiguiente ahorro de combustible sobre todo para los mercantes.
Tal y como ha sucedido en el equipo ganador, al que se unió el reto 7 por compartir un fin común como es la concienciación de que la “basuraleza” es el enemigo de mares y océanos, se da la circunstancia de que otros dos retos premiados se han fusionado en otro de temática similar, “poniendo de relieve la importancia del trabajo en equipo y la cooperación para crear sinergias en beneficio del resultado final”.
“El interés y la calidad” de los investigadores participantes ha quedado de manifiesto durante las 48 horas que han estado trabajando en torno a los retos, durante los encuentros con los mentores y en la presentación final de proyectos, “cumpliendo la expectativa” del Ocean Hackathon: la creación de herramientas para la mejora de los océanos, una de las actividades recogidas por Naciones Unidas para la década de las ciencias marinas por un océano sostenible.
Durante este fin de semana además de la intensa actividad en torno a los equipos, los speed learning, las consultas y sesiones con los mentores y la investigación en general, “se han puesto de manifiesto notas de color que hay que destacar y que pone de relieve el nivel de excelencia y la internacionalización del Ocean Hackathon”, se subraya desde la organización en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz.
Uno de los equipos, concretamente el número 8, sobre turismo azul, tenía entre sus componentes una investigadora brasileña, que trabajaba simultáneamente en remoto desde su país. Otro dato que ha destacado es la alta participación femenina. De hecho, de los promotores de los nueve retos iniciales, seis son mujeres, así como casi el 50% del total de participantes.
Los equipos han trabajado sobre temáticas que van desde el desarrollo de una App que permita evaluar la contaminación de la basura en el mar, otra App para el turismo azul, la valoración de la basura en el mar a través de drones, el uso de la basura marina en la elaboración de material escolar para la educación azul o el desarrollo de un logaritmo para el ahorro de combustible y la reducción de contaminación en la ruta de transporte marítimo. Todos fueron seleccionados cumpliendo criterios de vinculación con el mar, uso y disponibilidad de datos, innovación y originalidad y conservación de los oceános.
Además de los premios a los tres primeros galardonados, todos los retos participantes obtienen además una estancia gratuita en la incubadora de economía azul Incubazul, que la Zona Franca está desarrollando en su proyecto Zona Base Cádiz. De hecho, la celebración del Ocean Hackathon 2020 se enmarca en las acciones de esta incubadora y da el pistoletazo de salida a la andadura de Incubazul.
El acto de clausura del domingo estuvo presidido por el delegado del Estado de la Zona Franca de Cádiz, Fran González, acompañado por José Manuel Sánchez, de la UCA, y Miguel Sánchez Cossio del CEEI Bahía de Cádiz, además del coordinador de Incubazul, José David Sánchez de Medina, que fue el encargado de presentar el acto.