La asociación Calor en la Noche celebra esta semana el primer aniversario de la puesta en marcha de su servicio de desayunos para las personas sin hogar de Cádiz. Fue el pasado 3 de octubre de 2016 cuando dio comienzo esta iniciativa en el local de la entidad, situado en la avenida Campo del Sur, 22 (con entrada por la calle Regimiento de Infantería de Cádiz) y cedido por el Ayuntamiento.
Durante estos doce meses se ha atendido a los sintechos de lunes a domingo, en horario de 9 a 10.30 horas y realizando los turnos de comedor necesarios según la demanda diaria. En total, se ha atendido a 574 personas y el número de desayunos servidos asciende a 33.892.
Estas cifras certifican, según explica en una nota remitida a DIRIO Bahía de Cádiz el presidente de Calor en la Noche, Manolo Mení, que “la ciudad necesitaba de este recurso que viene a cubrir un hueco del día en el que las personas sin hogar apenas contaban con asistencia”.
Con motivo de este aniversario, en estos días los voluntarios van a servir desayunos ‘especiales’, con productos que habitualmente no forman parte del menú y, coincidiendo con el “cumpleaños” de la sede –el martes 3 de octubre- se hará una celebración con tartas adquiridas para la ocasión.
El perfil de las personas atendidas es mayoritariamente el de personas sin hogar que vive de forma habitual en las calles de la capital, aunque también han pasado por el comedor personas que están en la ciudad de forma ocasional, varios de diferentes nacionalidades y, en un número elevado, “vecinos y vecinas de Cádiz que por motivos de la crisis no tienen recursos para hacer frente a las necesidades cotidianas”.
Cuenta Manolo Mení que “se han superado todas las expectativas que teníamos cuando decidimos poner en marcha este proyecto”, que se ha desarrollado “gracias al compromiso de decenas de voluntarios que acuden al local todos los días de la semana de forma puntual y totalmente altruista”.
Allí no sólo se sirven desayunos, sino que se ofrece a los usuarios un trato personal, cercano, se les asesora sobre los recursos sociales disponibles en otros organismos públicos y entidades privadas, se atiende a peticiones particulares referidas a la necesidad de ropa o sacos de dormir, etc. Además, Calor en la Noche ofrece a las personas que atiende un servicio de atención médica y, con una periodicidad que depende de la demanda, servicio de peluquería. Todo ello, se insiste, gracias a profesionales que realizan su labor voluntariamente.
La compra de los alimentos y el material necesario para atender a los usuarios se sufraga con las cuotas de los socios y con donaciones de particulares, principalmente. Además, Calor en la Noche ha recibido una importante ayuda con la donación en dos ocasiones de parte del sobrante del sueldo del alcalde, José María González ‘Kichi’, y con ayudas puntuales de instituciones como la Diputación.
Aparte del servicio de desayunos, esta asociación lleva ya 15 años recorriendo por las noches las calles para ofrecer, a quienes se ven abocados a vivir al raso, una taza de café o caldo, prendas de abrigo, sacos de dormir “y, sobre todo, compañía”. Su labor ha traspasado las fronteras de la ciudad y nuevos voluntarios, siempre vinculados a las comunidades educativas de La Salle, están desarrollando la misma labor en diferentes puntos de la Bahía, como San Fernando y El Puerto de Santa María. La intención es que la iniciativa se extienda en fechas próximas a otras localidades como Sanlúcar.
