Tras seis semanas apagadas en el contexto de estado de alarma ante la crisis sanitaria del coronavirus, las fuentes ornamentales de la ciudad de Cádiz se preparan para volver a funcionar.
Este lunes han empezado las labores de puesta a punto para el llenado y la activación de las 31 fuentes ornamentales que hay repartidas en la capital, donde poco a poco empieza a recobrarse cierta normalidad y repunta ya la presencia de transeúntes, en paralelo al inicio de la llamada desescalada.
Estas fuentes fueron vaciadas y suspendidas por la empresa municipal Aguas de Cádiz el pasado 23 de marzo, días después de decretarse por parte del Gobierno de España el confinamiento de la población, y en la línea del apagado energético de equipos y aparatos de edificios municipales sin actividad que implementó el Ayuntamiento.
Ahora, tras seis semanas con las fuentes vacías, se han puesto en marcha los trabajos oportunos para que vuelvan a estar en funcionamiento. La primera que volverá a tener su actividad habitual, si el viento lo permite, es la fuente de colores de la Plaza de Sevilla. Operarios de Aguas de Cádiz ya han intervenido sobre el mecanismo de chorros de agua y luces de una de las fuentes más emblemáticas y vistosas de Cádiz.
Asimismo, según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz, durante esta semana se irán progresivamente poniendo en uso la cascada del Parque Genovés, la fuente de San Juan de Dios, la de la Avenida de Las Cortes, la fuente de la Plaza del Mentidero, la fuente de las tortugas, la de la Plaza de España, la del monumento a Falla y la del paseo principal y de los niños del paraguas del Parque Genovés.
Esta medida se aplica sólo sobre las fuentes ornamentales, ya que las fuentes de agua potable de toda la ciudad han permanecido en funcionamiento durante todo este periodo de cuarentena para no dejar sin servicio este recurso básico.