Ana Fernández y Helena Fernández, como presidenta de Aguas de Cádiz y concejala de Asuntos Sociales, respectivamente, acompañadas de sus equipos técnicos. han mantenido una reunión para actualizar los trámites y el procedimiento que tienen que seguir los vecinos en situación de vulnerabilidad para acceder al Suministro Mínimo Vital (SMV) del que, en la actualidad, se benefician más de un millar de familias.
Desde el origen de este programa puesto en marcha en 2017, “uno de los objetivos que se pretendía era el de simplificar el procedimiento y evitar que cada dos meses las familias en situación de exclusión social tuvieran que renovar las ayudas para el pago de recibos de agua. Es por esto que este suministro mínimo vital de agua se concede por periodos anuales”, ha recordado Ana Fernández.
Además, como añade Helena Fernández, “desde el convencimiento de que el agua como un derecho universal y un bien básico de primera necesidad, la concesión de este suministro evita que se produzcan cortes de agua. Además, se fomenta la autogestión por parte de las personas usuarias de este suministro”.
Con el propósito de seguir mejorando este programa, se ha acordado actualizar el procedimiento y modificar los trámites burocráticos para hacerlos “más ágiles” y facilitar el acceso a estas ayudas a las personas que piden acogerse al SMV, se resalta en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz.
Igualmente, con la intención de seguir apoyando esta iniciativa municipal, la dirección de la empresa pública Aguas de Cádiz llevará a su consejo de administración la propuesta de aumentar de 300.00 euros a 350.000 euros al año su aportación al programa, aspecto que también deberá aprobarse en la Junta de Gobierno Local.
“Seguimos reforzando así la colaboración entre la empresa municipal y de Asuntos Sociales a favor de la inclusión social, uno del os ejes fundamentales de Agua de Cádiz”, se subraya.
Desde que se pusiera en marcha este Suministro Mínimo Vital en 2017, se han concedido 3.710 solicitudes y se han abonado un total de 19.079 facturas. De hecho, durante el pasado 2021 se concedieron 270 solicitudes nuevas que se sumaron a las 792 renovadas y se denegaron 183. Se llegaron a pagar 5.350 facturas por un coste cercano a los 231.000 euros en relación al gasto de agua y de 92.000 por la tasa de residuos urbanos.