La Casa de Iberoamérica de Cádiz ha abierto sus puertas hasta finales de junio a la exposición ‘Reinvenciones: la ubicuidad de las identidades en lo fotográfico desde el Caribe’. Una muestra temporal que se plantea como “un espacio que desafía las nociones que todavía prevalecen y funcionan en el imaginario sobre lo dominicano o lo caribeño”.
La iniciativa está organizada por la sociedad municipal Cádiz 2012 y el Centro León de la República Dominicana (que aporta los fondos de la exhibición), y llega a la capital gaditana procedente de Casa de América de Madrid, como una de las actividades de ARCOMadrid 2024, que ha estado dedicada al mar Caribe en su 43 edición.
El concejal de Presidencia y presidente de Cádiz 2012, Pablo Otero, ha participado en la inauguración junto a la delegada de Gobierno de la Junta de Andalucía en Cádiz, Mercedes Colombo, y su nueva territorial de Turismo, Cultura y Deporte, Tania Barcelona.
‘Reinvenciones’ se articula a partir de la Colección Eduardo León Jimenes de Artes Visuales y se compone de 74 obras de 22 artistas caribeños: Alejandro Cartagena, Nicolás Derné, Polibio Díaz, Patricia Encarnación, Diana López, Joiri Minaya, Citlally Miranda, Eliazar Ortiz Roa, Raquel Paiewonsky, Andrés Ramírez Gaviria, Roberto Stephenson, Juan Alfonso Zapata, Domingo Batista, José Antonio Ramírez, Julio González, Max Pou, Pedro José Borrell, Pedro Nicasio, Santiago (Chaguito) Morel, Víctor (Cuqui) Cabrera, Wifredo García y la colectiva Juana y si no su hermana.
Según se detalla en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, en esta exposición con el comisariado de Sara Hermann Morera y Joel Butler Fernández conviven dos núcleos fundamentales que se entrelazan conceptualmente, la fotografía histórica y la continuidad de los diversos temas y acercamientos planteados en el primer espacio, en la actualidad.
La primera parte se dedica a la fotográfica histórica que se generó en República Dominicana después de la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo (1930-1961), sustituyendo a la anterior producción, cargada de contenidos románticos y edulcorados de la realidad, y basada principalmente en la exégesis del régimen imperante. Además de explorar los orígenes de la fotografía dominicana contemporánea, muestra los aportes de esta expresión artística en la búsqueda de los posibles componentes de un nuevo imaginario nacional.
Después del núcleo histórico, se propone un espacio dedicado a la producción contemporánea bajo el lema ‘Sujeto encontrado’. Este ámbito expositivo plantea una coherente continuidad histórica en el ejercicio de la fotografía desde un Caribe expandido en la contemporaneidad. Lo fotográfico como hecho, evento y lenguaje muestra una independencia indiscutible que es evidente en su espectro de acción e influencia y en el reconocimiento indefectible de las múltiples identidades que nos habitan.