“El Reglamento de Participación Ciudadana del Ayuntamiento de Cádiz que aprobó la oposición ha durado menos de un mes”. Es la contundente afirmación de la concejala de Participación Ciudadana, María Romay, añadiendo que “ya lo advertimos durante todo el proceso”. Y es que “la ley que el Parlamento andaluz acaba de aprobar deja sin efectos a este documento que nació muerto ante la insistencia de la oposición y en especial del PSOE, de enfrentar a la ciudadanía con este equipo de Gobierno”. Una propuesta de modificación del reglamento impuesta por la federación de vecinos 5 de Abril, con el aliento de PP, PSOE y Cs, que veía la luz verde definitiva en el pasado pleno ordinario de octubre.
De este modo, Romay señala que la nueva ley de la comunidad autónoma impulsará nuevas formas de democracia directa complementarias del modelo representativo: “durante todo el proceso de elaboración del reglamento municipal advertimos una y otra vez que era necesario esperar a que se aprobara el nuevo reglamento andaluz para configurarlo en base a él y no tener que volver a reiniciar el proceso, puesto que la propuesta que trajeron una y otra vez los miembros de la oposición no se ajustaba a lo que se estaba trabajando desde el Parlamento andaluz”.
“Después de que nos criticaran por activa y pasiva y quisieran enfrentarnos con las asociaciones de la ciudad, en especial con 5 de Abril, el tiempo nos ha dado la razón y nos obliga a cambiar el reglamento actual de apenas un mes de vida”, se queja esta edil de Por Cádiz sí se puede.
En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz Romay insiste en que “lo advertimos, pero la oposición, comandada por el PSOE, decidió hacer un uso torticero del documento”. “Tras 20 años sin reglamento, nos decían que no podían esperar más y que era urgente aprobar un documento, aún sabiendo de su corta vida”. En referencia a esto, apostilla que la Junta obliga a los municipios a adaptar sus reglamentos de participación ciudadana “en un plazo de doce meses desde su entrada en vigor”.
“El PSOE, y en concreto el concejal encargado de defender este documento que nació muerto, José Pacheco, no sólo no quisieron oír nuestras argumentaciones o los informes que realizó el secretario municipal advirtiendo de su necesidad de adaptarlo a la nueva norma andaluza, también hicieron caso omiso a las declaraciones de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP) y su propio partido que es el que ha liderado la nueva ley andaluza”. Y todo esto, subraya la concejala responsable, “sin ruborizarse lo más mínimo y con el único fin de enfrentar al movimiento asociativo de la ciudad entre sí y con nosotros mismos”.
María Romay ha hecho hincapié en que “tal y como explicamos de forma reiterada y ahora ha quedado demostrado, el reglamento de la oposición es un reglamento sin participación y sin la aportación de muchos colectivos de la ciudad que la hacen posible”.
En esta línea, ha destacado que la nueva norma andaluza regula la participación ciudadana ya sea de forma directa como a través de entidades en los procesos de elaboración de presupuestos, de proposición de políticas públicas y elaboración de normas, evaluación y consultas populares.
Curiosamente, en la última semana el PP en el Ayuntamiento informada de una reunión con representantes de la federación de vecinos en la que, entre otros temas, abordaron la puesta en marcha del nuevo Reglamento de Participación Ciudadana: “las dos partes acordaron hacer un seguimiento de la forma en la que el Ayuntamiento articula la participación ciudadana de esta federación y de las entidades vecinales con los instrumentos que el nuevo documento establece”, se exponía.
EL FORO DE PARTICIPACIÓN CIUDADANA TAMBIÉN LO ADVIRTIÓ
Por su lado, en el mismo momento de la aprobación definitiva de este documento, el llamado Foro de Participación Ciudadana de Cádiz insistía en remarcar que esa propuesta de 5 de Abril iba “en contra de todos los dictámenes técnicos y la petición clamorosa de un buen número de colectivos y asociaciones”. “No insistiremos en las limitaciones evidentes del reglamento aprobado porque el informe preceptivo del Secretario del Ayuntamiento ya las puso en evidencia, sin que ello haya servido para entrar en razón a los grupos de la oposición municipal. Sus argumentos para empeñarse en la aprobación de ese texto obsoleto y excluyente no han sido técnicos sino políticos”, se subrayaba.
Así, se criticaba que a PP, PSOE y Cs les dé igual que el reglamento “deje fuera a todo el tejido asociativo no vecinal de la ciudad, que no tenga en cuenta la participación de la ciudadanía no asociada, que se olvide de las modernas tecnologías y las nuevas formas de participación, no les importa dividir y enfrentar al ámbito colectivo, siempre que ello les sirva para debilitar al actual equipo de Gobierno municipal”.