El concejal de Economía, Hacienda y Deuda del Ayuntamiento de Cádiz, David Navarro, fue reprobado por la oposición en bloque en el pleno ordinario de julio, en el que incluso se le instó a presentar su dimisión o en caso contario, a que el alcalde lo cese. Ni una cosa ni otra va a pasar, como ya se sabía antes de la sesión, durante y después.
Quizá fue el punto más bronco de este pleno. Fue el PSOE quien elevó a pleno la cuestión, aunque finalmente se votó y salió adelante –con los votos a favor de PP, PSOE y Cs y en contra de Por Cádiz sí se puede y Ganar Cádiz en Común- la enmienda de sustitución formulada por Ciudadanos, contemplando que se reprobara públicamente la gestión de Navarro; que en caso de prosperar la reprobación, el pleno requiera a este concejal que renuncie a los cargos que ostenta y presente su dimisión; y que en caso de no cesar voluntariamente en el ejercicio de sus funciones, el pleno inste al alcalde para que le cese de las funciones que tiene delegadas.
El portavoz municipal de Cs, Juan Manuel Pérez Dorao, acusó en su intervención a Navarro de ser “responsable de la aprobación de un presupuesto desnivelado y mediante un proceso antidemocrática; además de la prórroga de la elaboración del presupuesto de 2016 y de la no liquidación del presupuesto 2016”. Y en la tema de la venta del módulo hotelero en la tribuna del estadio Carranza, “tiene alguna responsabilidad, pero la determinación de que exista un comprador no es objetivable imputable a usted”, le reconoció.
Por su parte, por parte del PSOE hablaba Juan Cantero, quien enumeró una serie de motivos para la reprobación y dimisión de Navarro: “incumplió uno de sus compromisos: auditoría de la deuda; la mayor parte de los pliegos están en situación de prórroga; no ha tenido tiempo de coordinar algunos pliegos de gran importancia y condenar a los gaditanos a disfrutar servicios de peor calidad; la falta de transparencia en la información económica es el tercer motivo para su dimisión; la prórroga de los presupuestos y que no se haya vendido el hotel del estadio”.
Y el portavoz del PP, Ignacio Romaní, señaló que el alcalde, José María González ‘Kichi’, es el “único” responsable de este “desastre económico”. “Lleva dos años gobernando y no se le conoce ninguna gestión en la ciudad”, interpretó “Asuma su responsabilidad. La situación es complicada y el alcalde debe asumirlo”, añadía.
“UNA MOCIÓN DE CENSURA ENCUBIERTA”
En su primer turno de palabra, el edil de Hacienda tiró de hemeroteca contra el PSOE y su portavoz, impulsores de esta moción: “Fran González daba la Alcaldía para luego bloquear, lo ha estado cumpliendo desde el primer momento. Digno de alabanza”; “Fran González, desde que es portavoz del PSOE, no ha pedido ninguna dimisión o reprobación en el pleno a concejales del PP”; “Ya se cobraron una pieza con González Bauza y quieren cobrarse otra, entiendo que les gusta la caza”; “Informes de Tesorería e Intervención del Ayuntamiento de junio 2016 avalan que se reduce la deuda más de 20 millones”. “El Ministerio de Hacienda nos ha felicitado y nos ponía ejemplo de buena gestión económica”.
Según el relato trasladado a DIARIO Bahía de Cádiz desde el Ayuntamiento, el portavoz socialista, Fran González, se defendió interpretando que Navarro quiere deslegitimarlo con mentiras, y llegó a pedir también el cese de los asesores que han preparado con el concejal su intervención, al asegurar que están basadas en falsedades. “De tanto mentir termina usted engañándose a sí mismo”. Y durante su intervención llegó a apuntar que “si sale reprobado, no le vamos a aceptar ningún tipo de representación. Si el alcalde no le cambia de funciones, no le reconoceremos en las áreas que usted gestiona”. Algo que el edil de Hacienda “agradecería por su salud mental”, apostilló.
Por su lado, David Navarro lamentó que el “partido local de Fran González esté haciendo una oposición agresiva” y que su política sea “un acto teatral para reivindicarse él individualmente”. “A Fran González no le importa lo más mínimo la ciudad”, ha enfatizado. “Lo que se está debatiendo es la frustración acumulada de un político profesional de 35 años que cuando termine esto no sabe a dónde va a ir”, no dudó en apuntar. Y concluyó su intervención con un: “no dimitiré, me quedo”.
El alcalde compartió parte del tiempo del edil de la agrupación de electores para recriminar a la oposición su actitud, especialmente al PP: “se les debería caer la cara de vergüenza por ser cómplices de esta lapidación pública y por decir que han contribuido a dinamizar la economía de esta ciudad, con el agujero que han dejado en las arcas municipales”.
Y los concejales del PSOE, el primer edil les llamó “cobardes” por “estar presentando una moción de censura encubierta. Si son valientes, únanse al PP y presenten una moción de censura”. Y tras la votación no se pudo callar un: “David no se va, se queda”.