Aunque la propuesta de estructura de costes del futuro servicio de transporte urbano colectivo de viajeros que “supondrá una revolución” salía adelante en pleno el pasado mayo, hasta ahora no se ha publicado en el BOE, abriéndose el correspondiente periodo de información pública. Tras este trámite, volverá a pleno antes de licitarse el importante contrato.
Tras resolverse uno de los grandes contratos encallados durante unos años, el de limpieza y recogida de basuras, el Ayuntamiento de Cádiz parece darle un empujón a otro de sus importantes servicios de gestión privatizada, cuya renovación se viene prometiendo también desde hace meses: los autobuses urbanos, que desde tiempos del franquismo está operado por la empresa Tranvía de Cádiz a San Fernando y Carraca.
Al respecto, el Boletín Oficial del Estado (BOE) acaba de publicar la apertura del periodo de información pública de 20 días hábiles de la propuesta de estructura de costes del futuro servicio de transporte urbano colectivo de viajeros de la ciudad, aprobado el pasado mayo en pleno.
En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, el concejal de Movilidad, Martín Vila, ha celebrado un “paso muy importante y necesario para la publicación del pliego” y ha confirmado que, una vez finalizado este trámite, el expediente irá de nuevo a pleno “lo antes posible” para su aprobación definitiva; de cara a iniciarse al fin el concurso público de adjudicación.
“SUPONDRÁ UNA REVOLUCIÓN EN EL TRANSPORTE URBANO”
Este nuevo pliego que se viene cocinando durante meses, “permitirá seguir avanzando en el cambio de paradigma de movilidad que estamos impulsando en la ciudad”, ya que “supondrá una revolución en el transporte urbano” que mejorará la frecuencia, el servicio a la ciudadanía y, además, ofrecerá “estabilidad y seguridad a los trabajadores”, asevera Vila. Y es que está contemplado un incremento de un 15% de las jornadas de trabajo, lo que “permitirá incluso ampliar la plantilla”.
El contrato a licitar en su momento tendrá una duración de 12 años y un presupuesto cercano a los 194 millones de euros (unos 235 millones, con IVA; o sea, un coste de 19,5 millones anuales).
La idea es remodelar algunas líneas existentes con objeto de mejorar las frecuencias de paso, resolviendo así las diferencias entre la línea que circula por la avenida y las que pasan por los barrios obreros. Además, se actualizarán los recorridos para minimizar los transbordos y favorecer la intermodalidad.
Y todo ello con una renovada y ampliada flota de autobuses, sustituyendo los actuales por vehículos híbridos menos contaminantes y menos ruidosos. Igualmente, la empresa que se haga con este goloso contrato estará obligada a renovar todas las marquesinas de la ciudad, y a ofrecer la gratuidad de este servicio público para los menores de hasta 12 años.