Las obras de la primera fase de urbanización de la avenida de Astilleros, en Cádiz, no han podido comenzar este lunes, 13 de agosto, tal y como estaba previsto por el Ayuntamiento, debido a la presencia de vehículos estacionados en la zona, a pesar de que a principios de mes se informó de la prohibición de hacerlo. Por ello, la Policía Local intentará contactar con los dueños de los 30 coches que continúan en el lugar para instarles a su retirada antes de proceder a imponer las multas correspondientes.
A pesar de la señalización informativa y del vallado colocado en la zona por parte de la empresa adjudicataria de los trabajos antes del pasado día 6, son una treintena los vehículos que continúan en el lugar, algunos de ellos en estado de semiabandono. De este modo, si pese a las gestiones que realizará la Policía Local continúa alguno el jueves de esta semana, se iniciará el pertinente procedimiento de abandono y se procederá a su retirada y envío al depósito municipal.
Esta circunstancia, lamentan desde el Consistorio en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, provoca que los trabajos planificados tengan que retrasarse varios días, estimándose un máximo de una semana. Estas tareas iniciales, que no afectarán al tráfico, consisten en la adaptación de solares y accesos en la carretera industrial para aparcamientos temporales.
La empresa Martín Casillas, por unos 320.000 euros, se adjudicó estas obras para crear dos zonas de aparcamiento junto a la carretera industrial, una en el solar junto a la estación de autobuses y la segunda en los terrenos de la Autoridad Portuaria Bahía de Cádiz. Entre otras tareas, ejecutará un acceso y reparación del acerado adyacente al estacionamiento de Adif, dadas las condiciones precarias en las que se encuentra. El plazo de desarrollo es de tres meses.
Estos trabajos se realizarán de forma coordinada con la urbanización de la avenida de Astilleros, que dará comienzo próximamente. Esa segunda fase cuenta con un presupuesto de más de 525.000 euros y un plazo de ejecución de cuatro meses. Parte de esa inversión se realizará con fondos del plan Invierte de la Diputación, concretamente unos 61.000 euros.
Estas tareas se enmarcan dentro del compromiso del equipo de Gobierno de dar “una solución transitoria” al deteriorado estado de la que es una de las principales vías de la ciudad. Así, se ubicará una capa de rodadura a toda la avenida y se reparará todo el firme, que actualmente se encuentra con importantes desperfectos debido al alto tránsito que registra.
La actuación se complementa con la reforma de los acerados de acceso a la estación de autobuses para garantizar el acceso a la misma en condiciones de seguridad y el futuro aparcamiento que se ubicará en el muelle pesquero. Estos trabajos, además, permitirán avanzar en la ejecución del carril bici que conectará la barriada de la barriada de La Paz con la plaza de Sevilla. Asimismo, el proyecto recoge la ejecución de todas las infraestructuras subterráneas y redes de servicios coincidentes en planta con el acerado proyectado.
Y OBRAS EN LA CALLE VEEDOR
En paralelo, este lunes día 13 la empresa municipal Aguas de Cádiz tenía previsto también iniciar la primera fase de las obras del proyecto de sustitución de redes de abastecimiento y saneamiento en la calle Veedor, lo que implicará cortes de tráfico y la reordenación de la circulación de vehículos en la zona. Unas obras que ya se han demorado unas semanas, en acuerdo con comerciantes y hosteleros, y que realmente comenzarán a notarse a partid el 20 de agosto. Inicialmente se trabajará en un pequeño tramo de la calle Zaragoza, con el reto de tenerlas listo antes de las navidades.
Durante las obras, unos cuatro meses, la Policía Local elaborará un plan de tráfico que desviará la circulación de Veedor hacia la calle Zaragoza y Benjumea, y el Ayuntamiento pondrá a disposición de los vecinos un número de teléfono para responder a dudas y facilitar cualquier información que requieran.
La obra también se la ha adjudicado Martín Casillas, por alrededor de 189.000 euros, y consiste en la sustitución de las antiguas conducciones de fibrocemento de la red de abastecimiento por otras de conducción dúctil entre la plaza del Mentidero y la plaza de San Antonio. La actuación contempla la reposición de todas las acometidas, así como las conexiones con las calles adyacentes incluida la valvulería necesaria y las conducciones de saneamiento que, por su antigüedad, se encuentran en mal estado de conservación.
Al tiempo, para restituir la pavimentación existente y adaptar la calle a la normativa sobre supresión de barreras arquitectónicas se seguirá el modelo de pavimentación del casco antiguo, es decir, con adoquines de granito y solería. Para ello, en coordinación con la Oficina Técnica de Proyectos e Inversiones del Ayuntamiento, se ha diseñado la nueva pavimentación que suprimirá los bordillos de las aceras dejará a un mismo nivel todo el ancho de la calle para facilitar el tránsito de peatones.
En cuanto al tráfico rodado, debido a los cortes de tráfico que se producirán en el citado tramo de la calle Zaragoza y en la calle Veedor, se reordenará la circulación de vehículos de la zona, en especial el acceso y salida a la plaza de San Antonio. Así, sólo se permitirá el acceso de vehículos para labores de carga y descarga, a los usuarios de garaje y la zona reservada para discapacitados.