Personal voluntario y personas usuarias del programa municipal Bajemos a la Calle, enmarcado en el Plan Local de Salud, han participado este jueves en una jornada de convivencia. Se trata de uno de los modelos de salidas previstos en la iniciativa que desarrolla desde hace unos meses el Ayuntamiento de Cádiz en colaboración con Cruz Roja para la promoción de las relaciones sociales de las personas que tienen problemas para salir a la calle por sí solas.
Desde que se puso en marcha esta iniciativa con la firma del convenio con Cruz Roja, el programa cuenta con la petición de casi medio centenar de personas: 34 ya están participando y 13 están en proceso de evaluación y próximamente se incorporarán.
En concreto, se ha organizado una visita teatralizada por el casco histórico en el que tanto las personas usuarias como el voluntariado han podido recorrer distintas calles de la ciudad.
En un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, la concejala de Salud en funciones, Eva Tubío, incide en que “con este tipo de iniciativas animamos a los usuarios del programa a realizar visitas culturales, sociales interesantes además de fomentar las relaciones personales”.
La edil izquierdista recuerda que el objetivo de esta iniciativa que surge de los diagnósticos de los perfiles de salud es combatir el aislamiento que tienen muchos ancianos de la capital que viven confinados en sus casas ante la imposibilidad de bajar por ellos mismos a la calle.”Es una realidad que se vio reflejada en el perfil de salud de La Viña y que vimos cómo se trasladaba también al resto de la ciudad”, por lo que el programa ya se ha extendido tanto por intramuros como por extramuros.
Bajemos a la Calle contempla salidas bien a través del apoyo físico con personas que dan seguridad y estabilidad a la persona mayor o bien a través de un scalamobil, indicada en aquellos casos en los que el deterioro físico no permite al mayor hacerlo por su propio pie. Cuenta con varios tipos de salidas, las que se programan con carácter quincenal o semanal con un duración entre dos y cuatro horas, las salidas extraordinarias para ir al centro de salud, celebraciones familiares o actividades en el barrio… y salidas en grupo como la celebrada este jueves.