El Carnaval de Cádiz 2016, ahora sí, ha dicho adiós, tras la celebración el pasado fin de semana del llamado Carnaval Chiquito, incluido en los últimos años, de alguna manera, dentro de la programación oficial. El concejal responsable destaca al respecto el “gran ambiente” que pudo vivirse en la ciudad con esta ‘propina’ de la fiesta, y valora que las coplas protagonizaran esta jornada, culminada con los fuegos artificiales suspendidos hace una semana.
El Carnaval de Cádiz 2016, ahora sí, ha dicho adiós, tras la celebración el pasado fin de semana del llamado Carnaval Chiquito, incluido en los últimos años, de alguna manera, dentro de la programación oficial (tras los incidentes con la Policía Local en 2013). El concejal de Fiestas, Adrián Martínez de Pinillos, ha destacado al respecto el “gran ambiente” que pudo vivirse en la ciudad con esta ‘propina’ de la fiesta “que se está extendiendo a todo el fin de semana con diversos actos”.
En esta línea, valora que fueran las coplas las que protagonizaron los últimos coletazos del Carnaval 2016, y aboga por “seguir trabajando” este carnaval ‘de los jartibles’ (que naciera hace treinta años) para “que se pueda aprovechar hasta el último suspiro todo el Carnaval”.
Este concejal de Por Cádiz sí se puede reconoce en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz que “este año nos ha servido para ganar mucha experiencia, para que también todo el mundo conozca y sepa en qué línea queremos trabajar”; al tiempo que sostiene que “aún quedan muchos hitos carnavalescos en el resto del año, y en muchos de ellos queda margen para pulir algunos aspectos”.
Igualmente, insiste en que, a su juicio, la campaña informativa lanzada estas semanas contra el botellón en el Carnaval de Cádiz “ha sido muy positiva, y hemos obtenido resultados: los hosteleros y la gente nos ha trasladado que ha mejorado el ambiente porque ha disminuido la presencia de botellones y macrobotellones en las calles”.
Martínez de Pinillos –que calificaba de “muy positivo” el Carnaval 2016 tras del Domingo de Piñata– se muestra finalmente “muy satisfecho con la delegación de Fiestas y con el trabajo que han desempeñado todos los participantes de la fiesta, que de un modo u otro han contribuido a engrandecerla un año más”.
De forma extraordinaria, este Carnaval Chiquito se cerraba con la quema de la Bruja Piti y fuegos artificiales desde el castillo de San Sebastián. Ambas actividades se suspendieron el pasado domingo por el temporal de viento, y se optó por celebrarlas en este broche extraoficial –pero a la vez, oficial- de la fiesta por antonomasia de la ciudad de 2016.
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