La cantaora Mariana Cornejo ya tiene su ‘sitio’ en Cádiz, en concreto en la plaza de la Merced, donde ya se encuentra la escultura del cantaor gaditano Chano Lobato, justo delante del Centro Municipal de Arte Flamenco de La Merced.
La Fundación Municipal de Cultura del Ayuntamiento, con la colaboración de Cemabasa, ha culminado esta actuación que se anunciaba en verano de 2017 y que se dijo que estaría a finales de ese año, pero que se ha demorado doce meses más.
La inauguración de la escultura en homenaje de la cantaora, fallecida en noviembre de 2013, se desarrollaba en la tarde del 20 de diciembre con la presencia de numerosas personas, y entre ellas, la concejala de Cultura, Eva Tubío y la familia de Cornejo. Este acto servía además como broche de oro al programa de otoño del Ayuntamiento dedicado al flamenco.
Además, ese mismo jueves se estrenó la exposición exterior ‘Flamencos con Mariana Cornejo’, del fotógrafo Joaquín Hernández Kiki, que recopila momentos del homenaje dedicado a la artista en 2015 en el Gran Teatro Falla.
La estatua en bronce, en la que resalta la sonrisa, es obra de José Antonio Barberá, autor también de la figura de la bailaora Conchita Aranda y del cantaor Chano Lobato.
La Fundación Municipal de Cultura se comprometió en su momento a aportar a Cemabasa, para el pago de la factura del escultor, la suma de 10.000 euros, que responde a la cuantía que se recaudó con el espectáculo homenaje que se celebró en el Falla en el año 2015 –bajo el nombre de ‘Su arte está presente’- y en el que participaron de forma desinteresada más de 60 artistas; y ha asumido los costes de traslado, instalación y colocación de la escultura. Y Cemabasa, empresa pública que gestiona el cementerio mancomunado de Chiclana, ha aportado los restantes más de 22.000 euros del valor de la escultura, según se informó a DIARIO Bahía de Cádiz.
CINCO AÑOS SIN LA “ALEGRÍA” DE MARIANA DE CÁDIZ
Cornejo falleció el 6 de noviembre de 2013, de forma repentina e inesperada, con 66 años de edad. Conocida artísticamente también como ‘Mariana de Cádiz’, empezó a cantar aun muy niña con su tío Canaleja de Puerto Real, siendo continuadora de varios de sus estilos, como las chuflillas gaditanas. Llevaba la sal y la alegría de Cádiz allí a donde iba. Seguidora de los maestros de su tierra como la Perla de Cádiz, Pericón, su tío Canaleja, Enrique el Mellizo y otros.
La cantaora, nacida en 1947, se retiró al contraer matrimonio para volver en los primeros años 80, actuando en festivales y peñas flamencas. Seguía la escuela cantaora de La Niña de los Peines y La Perla de Cádiz, principalmente en los estilos de tangos, bulerías, alegrías y soleares.
Entre su discografía destaca la antología Cádiz por cantiñas, producido en 2008 por Antonio Murciano y donde rendía homenaje a La Perla, La Paquera, Manolo Vargas y El Chaqueta, entre otros artistas.