El arquitecto Julio Malo de Molina, el primer decano del Colegio de Arquitectos de Cádiz en el período comprendido entre 2001 y 2007, falleció el jueves a los 72 años de edad en el Hospital de Puerto Real, donde llevaba ingresado varias semanas positivo por coronavirus.
El alcalde de Cádiz, José María González ‘Kichi’, ha trasladado públicamente su pesar por el fallecimiento. Además, se ha decretado un día de luto oficial; el pendón morado luce a media asta en la fachada del Ayuntamiento hasta el sábado a mediodía.
En un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, el primer edil quiere hacer llegar, en nombre de toda la Corporación municipal, “nuestras condolencias y nuestro afecto a sus familiares, amigos y compañeros por tan sensible pérdida”.
La exalcaldesa y actual presidenta de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz, Teófila Martínez, también ha expresado su duelo en redes sociales: “mi pesar por el fallecimiento de Julio. Tuve la suerte de compartir muchos momentos en proyectos comunes cuando presidió el Colegio de Arquitectos. Siempre amable, siempre colaborador… una pena su pérdida. Transmito mi abrazo a su familia y amigos”.
Julio Malo de Molina fue “un gaditano de vocación” que nació en Santa Cruz de Tenerife. En 1973 se doctoró en Escuela de Arquitectura de Madrid, y fue director de Patrimonio en la Diputación de Cádiz, donde se jubiló en 2004.
Fruto de su amor por esta ciudad dio contenido a ‘La guía de arquitectura de Cádiz’, que escribió junto a su amigo y también arquitecto Juan Jiménez-Mata, así como otras obras relacionadas con la capital gaditana.
Desde el Colegio de Arquitectos de Cádiz se le recuerda como “persona culta, apasionado de la arquitectura, los libros y los viajes; fue un excelente escritor y un prolijo articulista, labor que mantuvo viva hasta el último momento”. Fue el primer decano de este colegio profesional, y durante su mandato “logró situar a la institución en primera línea de la cultura arquitectónica nacional, desarrollando una ingente actividad en pro de la difusión de la profesión y de la defensa de la arquitectura contemporánea”.
Entre sus obras se destacan la restauración del Palacio Provincial de la Diputación y del edificio de la UNED en la plaza de San Antonio, la Casa Santos en el paseo marítimo y el Edificio de viviendas en la calle Adelfas, estas dos últimas en colaboración con Luis Modet.