Continúa la intervención arqueológica previa sobre los restos de época romana localizados en Cádiz durante el movimiento de tierras en el solar de la calle Marqués de Cropani, donde la empresa municipal de vivienda, Procasa, ha iniciado la construcción de una promoción pública.
La propia concejala de Vivienda y Desarrollo Sostenible, y presidenta de Procasa, Ana Sanjuán, acompañada de técnicos de la empresa municipal, ha visitado el solar para interesarse por esta intervención arqueológica liderada por el arqueólogo de Procasa, Francisco Blanco. Y ha remarcado que “la cronología y el planning de trabajo (respecto a la promoción del bloque de 28 viviendas para alquiler social) no se han visto afectados en ningún momento”.
“Vamos a seguir profundizando en los descubrimientos arqueológicos de esta zona, que se trata de una necrópolis romana. Una vez culminado este proceso, seguiremos con la ejecución de las obras”, ha anotado esta edil del PP.
El pasado 19 de marzo dio comienzo la intervención arqueológica preventiva en la parcela y se planteó un sondeo inicial de 3 x 3 metros, cuyos resultados fueron negativos en cuanto a estructuras y materiales arqueológicos. No obstante, tal y como aparece en el informe arqueológico, se obtuvo una secuencia estratigráfica bastante clara.
Un nivel inicial con restos de cimentaciones y escombros de viviendas antiguas que allí existieron durante los siglos XIX y XX; un segundo nivel compuesto por arena dunar de playa de colmatación eólica, producto del abandono del terreno; un tercer nivel de arena castaña oscura correspondiente a un periodo romano imperial del siglo I d.C.; un cuarto nivel de arena castaña clara del periodo romano republicano entre los siglos II-I a.C.; y un quinto nivel de arena anaranjada en contacto con la arcilla, aún por determinar, posiblemente correspondiente al periodo fenicio. Bajo esta capa se localiza la arcilla rojiza del terreno natural.
INTERVENCIÓN EN MARCHA
En cuanto al capítulo de hallazgos efectuados hasta ahora, según se recopila en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, se han localizado en el tercer nivel correspondiente a la época romana imperial una canalización hidráulica que recogería el agua procedente del acueducto que desembocaría en unas cisternas e iría en dirección a una pileta que se ha podido localizar en el otro extremo del solar y que es medianero al bloque de viviendas del bloque en la avenida Ana de Viya. Parte de esta pileta se introduce bajo este bloque de viviendas por lo que solamente aparece una parte de ella.
Tanto canalización, pileta como el muro de piedra de refuerzo están realizados con cantos rodados y piedra caliza del tipo ostionera. Asimismo, la base de la canalización y pileta se ha elaborado con una fábrica de Opus Signinum (una mezcla de mortero a base de cal, arena y trozos de cerámica). La diferencia de cotas de esta canalización desde la parte más alta a la más baja para la caída del agua es de 29 cm en una distancia de unos 18 ml aproximadamente.
Aunque se pensó inicialmente que tanto la canalización como la pileta podrían tener un sentido para tema industrial pesquero, se ha descartado esta hipótesis y se apunta más a que tuviese carácter funerario ritual para la purificación de los cadáveres antes de proceder al enterramiento. Al respecto, el informe subraya que existe un paralelo claro en las excavaciones realizadas en la calle Huerta del Obispo, también en extramuros.
Además, han salido a la luz ya al menos seis enterramientos de incineración, tanto ‘in situ’ deposición primaria (busta) o deposición secundaria en urnas cinerarias. En la intervención, hasta ahora se excavado una urna cineraria, que corresponde a los huesos lavados de un niño.
Respecto al cuarto nivel correspondiente a un estrato de arena castaña clara, de momento solamente se ha encontrado una fuente de cerámica Campaniense del tipo A, que se ha fechado en finales del siglo III a.C. y principios del II a.C. Este nivel aún está pendiente de su excavación.
Finalmente, y en contacto con la arcilla natural, hay un quinto nivel compuesto por una fina capa anaranjada que podría pertenecer a la época fenicia, aún por determinar. En este estrato hay constancia de una posible incineración fenicia que se ha excavado en la arcilla.
Para poder proceder con la continuación de la intervención arqueológica es necesario desmontar dichas estructuras romanas en estado precario (canalización hidráulica y muros de apoyo). En este sentido, se ha trasladado el citado informe a la delegación provincial de Cultura en el que se solicita autorización.