Los ayuntamientos de Barcelona, Madrid, Pamplona, Zaragoza y Cádiz han lanzado un comunicado y un video conjunto de ‘Ciudades por una transición energética justa y democrática’, con el objetivo de explicar los proyectos que están desarrollando, reivindicar recursos y un marco normativo pro-renovable y sumar más ciudades a este cambio de modelo energético.
Estas cinco ciudades (cuatro de ellas con alcaldes de agrupaciones de electores promovidas por Podemos, y un primer edil de EH Bildu, en la capital Navarra), que colaboran en materia energética desde 2015, están ya comprando energía certificada 100% renovable, hacen frente a situaciones de pobreza energética con recursos propios, y promueven el autoconsumo (autoproducción renovable), el ahorro, y la eficiencia, en sus municipios.
“El modelo energético actual, basado en los combustibles fósiles (petróleo, gas y carbón, y energía nuclear), supone graves perjuicios al planeta y sus habitantes. Sus impactos en Norte y Sur son insostenibles e insoportables. Cambio climático, contaminación, problemas para la salud, expolio de recursos, conflictos bélicos,… Por ello, es urgente desarrollar una transición energética planificada y democrática, en la que la ciudadanía esté en el centro y participe del cambio. Y en esta transición, entendemos que las ciudades juegan un papel clave”, resalta esta declaración conjunta.
Al respecto, el alcalde gaditano, José María González ‘Kichi’, señala además que “la transición energética es una oportunidad para generar empleo de calidad en un tema que merece la pena, y para construir sociedades más humanas y más justas, pero este cambio no se va a dar porque sí, porque los intereses de la gente y los de los oligopolios son, en muchas ocasiones, contrapuestos”.
“Los oligopolios energéticos son poderosísimos, y frente a ellos, es imprescindible tejer alianzas, que defiendan lo público y a la gente. Por ello colaboramos con el resto de ciudades que quieren caminar en esa dirección”, apostilla el primer edil de Por Cádiz sí se puede.
En la declaración, según se ha trasladado a DIARIO Bahía de Cádiz, las ciudades firmantes reivindican una regulación energética que elimine los obstáculos a las renovables y ponga en el centro de las políticas el problema de la pobreza energética.
“También estamos reivindicando soberanía energética, es decir, que las administraciones locales y la ciudadanía, pueda participar en la toma de decisiones y en la producción y gestión de la energía” ha apuntado González Santos.
“A día de hoy, si bien, ciudades como Cádiz estamos haciendo un gran esfuerzo y estamos innovando en las soluciones, cada una con los recursos que tiene, esto no es suficiente para abordar las grandes transformaciones que hemos de emprender. Necesitamos recursos y herramientas” ha añadido.
En el comunicado (que se cierra con un “otro modelo energético es posible y ya ha empezado en las ciudades”), se incluye una síntesis de las acciones desarrolladas en cada ciudad: Barcelona y Pamplona están inmersas en la creación de una comercializadora pública 100% verde y de proximidad; Madrid ha divido su contrato de suministro eléctrico en lotes, y ha puesto de requisito que la empresa solo comercialice energía certificada de origen 100% renovable; y Zaragoza comprará energía directamente en el mercado mayorista, generando un gran ahorro económico y medioambiental.
Y por su parte, la capital gaditana, que ya dispone de una empresa semipública de electricidad (Eléctrica de Cádiz, participada mayoritariamente por el Consistorio), ha pasado a comercializar sólo electricidad certificada 100% renovable, lo que afecta a los edificios municipales y al 80% de las familias de la ciudad, que son clientes de la misma. Y en fechas recientes, ha empezado a producir energía renovable (con una modesta planta fotovoltaica, que espera extender en los próximos meses) y es pionera en la aprobación en su consejo de administración de un bono social alternativo al estatal, que sigue sin activarse por el bloqueo del PP local.